Devota de la curiosidad

Por Ana Teresa Toro

ana.toro@elnuevodia.com

"Será que están formando su nido", dice Esmeralda Santiago desde su casa ubicada en algún campo a una hora de Grand Central Station en Nueva York. Lo dice y de repente a uno se le antoja que cuente más de esas ardillas, de qué colores son las hojas, cómo es la ventana, si hace sol o no, si los animalitos se ven graciosos haciendo su nido. No puede evitarlo, como narradora de vocación y oficio, es capaz de llevar a su interlocutor -casi sin darse cuenta- de un relato a otro con la misma facilidad con la que lectores alrededor del mundo saltan de una página a otra leyendo las muchas vidas que ha contado, comenzado por la suya.

La escritora puertorriqueña radicada desde los 13 años en Estados Unidos y una de las voces más sólidas de la diáspora del País, estuvo recientemente en la Isla para asistir al estreno de la película "América", basada en "El sueño de América", su primera novela. Anteriormente sólo había publicado dentro del género de la memoria. El regreso siempre le genera reflexiones acerca del País que tanto ha narrado y del cual, a pesar de la distancia, nunca se ha desvinculado.

"Soy puertorriqueña y como tal me identifico. Voy a muchas conferencias sobre inmigración porque la experiencia emocional es la misma, pero no me represento como hispana, por ejemplo, esos títulos te los ponen otros", comentó en una ocasión a este diario la autora de memorias y libros de cuentos infantiles que aún sueña con "escribir un buen poema pero eso no va a pasar porque para eso no soy buena, un escritor debe reconocerse y abrir la mente a otros géneros para explorar". Lo dice con explosiva sinceridad.

Hablar con ella, es como darle al pedal a una máquina de preguntas que correrá sola. Es una mujer curiosa, al punto de que muchas de sus tardes o noches las pasa rebuscando en la web dentro de los 'blogs' relacionados a temas de tecnología.

"Mi marido dice que es un viudo de la tecnología. Me encantan los 'gadgets', tengo mi eBook y pienso que esos blogueros son excelentes escritores porque escriben muy rápido de un tema tan impersonal como la tecnología y lo acercan a la gente. Quizás no me interesen las cámaras de las que hablan pero un buen escritor que escribe sobre cámaras voy a leerlo. Desde niña he sido muy curiosa. Si estoy en una calle y veo un caminito, rápido voy a meterme por ahí", comparte la autora cuya personalidad pareciera oscilar entre la de la mujer cercana y hogareña y la 'femme fatale'...

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