Estilismo DE ALTURA
end.croldan@elnuevodia.com
Temprano en sus andanzas, Peter se planteó el reto de competir. "Me di cuenta de que era una manera de mostrar mi arte en un campo muy retante. De esos conocimientos, adquirí mucha disciplina. Aprendí a trabajar concentrado y buscar la perfección en un tiempo limitado, a pesar de las distracciones", explicó.
La ganancia de este esfuerzo no tiene precio, pero para propósitos de estimarla, bien podría medirse en millas. De Nueva York a Milán; de Roma a Moscú; de París a Barcelona. Peter ha surcado el mundo como competidor, representante, jurado o maestro. Fue delegado y entrenador del Equipo Olímpico de Estilismo en varias ocasiones. Junto a ellos obtuvo reconocimientos que pusieron el nombre de Puerto Rico en alto, como la medalla de bronce en las competencias del Congreso Mundial de la "Organisation Mondiale de la Coiffure" en Las Vegas, Nevada. Esta organización le nombró director creativo de su Junta de Directores en el año 2002. En la década de los 80, sorprendía al público semanalmente con sus creaciones en la cabellera de Charytín y junto a Ana Santiesteban asistió en los preparativos de destacadas reinas de belleza. Su talento ha sido solicitado por grandes de la moda dentro y fuera de la Isla, desde Nono Maldonado a Carolina Herrera.
Durante más de dos décadas, estuvo asociado a la reconocida estilista Eva Pasarell, junto a quien estableció, mucho más que un negocio, una legendaria sociedad en el mundo de la belleza. Esa colega, por quien guarda una admiración incalculable, se retiró. Actualmente, Cardón es dueño del salón donde dirige un equipo de 24 estilistas. Ellos, junto a sus clientes, son sus maestros y una fuente constante de inspiración.
Sobre su aprendizaje en el cambiante ambiente del estilismo, su ética de trabajo, sus experiencias y visiones, Peter Cardón habló largo y tendido en un encuentro con Por Dentro.
¿Siempre tuviste claro que querías ser estilista?
Desde que tengo uso de razón. Realmente sin saber que iba a dedicarme a esta profesión siempre me llamó la atención. Inicialmente mi madre estuvo muy de acuerdo, pero mi padre no entendía como entre tantas cosas para hacer yo quería dedicarme a la peluquería. Con el tiempo se dio cuenta de que me lo tomaba muy en serio. Creo que no importa lo que tu hagas tienes que ser apasionado, dedicado y lo mejor que puedas ser. Yo me he dedicado a eso y también a inculcar ese modo de pensar en la gente.
Y esa primera primera vez que agarraste la tijera. ¿Cómo fue?
Recuerdo que lo hice muy al principio. Un recorte en 'layers' a una amiga mía que fue muy valiente. Tenía una idea de lo que quería lograr pero en ese momento no sabía llegar al estilo. En momentos así uno se da cuenta lo importante que es el desarrollo técnico y educarte. Es un proceso continuo. Tú no dejas nunca de aprender.
¿Que...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba