Un 'revuelo' salarial contra el pueblo

Harry Narváez Munet

Vega Alta

Hoy día una hora de salario mínimo casi no alcanza para comprar una latita de "Corned Beef"; y el dinero no alcanza para comprar una escoba, que vale mucho más.

Favorezco que no se aumente el salario mínimo siempre y cuando se reduzcan todos los costos de agua, luz, peajes, impuestos, intereses de bancos e hipotecas, comida, transportación pública a los niveles que estaban en efecto para cuando fue efectivo el último aumento del mínimo.

Hay que ser bien insensible para pretender mantener a trabajadores quebrándose la espalda por salarios de esclavitud y hambre. Quien no viva de salario mínimo no puede pretender que sus semejantes pasen hambre y miseria.

Recordemos que el detonante de la Revolución Francesa (toma de la Bastilla) fue precisamente cuando una barra de pan era equivalente al ingreso de todo un día de trabajo. Cada aumento...

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