Ruta viable hacia la economía solidaria
Por Rebecca Banuchi
rebecca.banuchi@elnuevodia.com
Los monumentales retos financieros han alterado la conciencia de muchos empresarios que han empezado a poner en duda el modelo económico actual y han encontrado respuestas a muchas de sus inquietudes en sistemas alternos.
Cada vez son más quienes apuestan al modelo de la economía sostenible y solidaria, que se centra en el valor del capital humano y el poder que tiene el desarrollo de redes de apoyo para acabar con la inequidad y servir de fuente de empleo justo y digno.
A juicio de la economista Martha Quiñones, todas las empresas tienen la capacidad de reestructurarse con ese fin, y a pesar de los retos que supone el modelo capitalista para su desarrollo pleno, cada proyecto empresarial tiene el potencial de guiarse por esos valores.
"En este modelo el ánimo es mantener el desarrollo social y la calidad de vida de las personas relacionadas con esta actividad empresarial", sostuvo la economista.
"Se transfigura cómo se distribuyen las ganancias. La persona dueña de la empresa tiene que tener sus beneficios, pero siempre tiene el compromiso social de apoyar otras iniciativas", abundó.
A continuación, algunos ejemplos de iniciativas empresariales que encarnan estos principios:
La apertura de un centro comercial dejó de ser hace mucho una novedad en la Isla. Pero, si ese complejo de oficinas y negocios fue ideado y gestado por el esfuerzo comunitario, la historia es diferente.
Ese proyecto es una realidad desde el 2005 en la comunidad Playita Cortada de Santa Isabel, donde los lazos comunitarios y el interés común han logrado mantener un pequeño centro comercial donde por años permaneció abandonada una antigua escuela.
El proyecto no se desarrolló espontáneamente. Fue el resultado de un plan autogestado que buscaba acabar con la dependencia y devolverle a los residentes en la zona su capacidad creativa y productiva.
"A medida que a las personas se le facilitaban las cosas a través de ayudas económicas, iban perdiendo su utilidad y, en cierta manera, parte de su autoestima", manifestó Bienvenido Maldonado, uno de los fundadores de la Asociación Pro Desarrollo Social Económico y Cultural de Playita Cortada.
En el lugar, coexisten una incubadora para el desarrollo de microempresarios y pequeños comerciantes que generan ingresos para subsistir. Este último grupo incluye una cafetería, un colmado, un centro de alquiler de herramientas, una botánica y una academia de baile. "Nuestro objetivo no es...
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