Sentencia de Tribunal Supremo de Justicia de 21 de Septiembre de 1999 - 149 DPR 159

EmisorTribunal Supremo
DTS1999 DTS 140
TSPR1999 TSPR 140
DPR149 DPR 159
Fecha de Resolución21 de Septiembre de 1999

--- HTML PUBLIC "-//IETF//DTD HTML//EN">1999 DTS 140 SUCESIONES VEGA MARRERO V. AUTORIDAD DE ENERGÍA ELÉCTRICA 1999TSPR140

En el Tribunal Supremo de Puerto Rico

Las Sucns. de Francisco Vega

Marrero, Mariana Rodríguez Santana y Otros

Apelantes

vs.

Autoridad de Energía Eléctrica,

Las Compañías Aseguradoras y Otros

Apelados

José Velázquez Hernández y

María Esther Blanco, Etc.

Apelantes

vs.

Estado Libre Asociado de Puerto Rico,

Autoridad de Energía Eléctrica y Otros

Apelados

Certiorari

1999 TSPR 140

Número del Caso: CC-1998-307

149 DPR 159 (1999)

149 D.P.R. 159 (1999)

1999 JTS 151

Abogados de Sucns.

Fco. Vega Marrero,

Mariana Rodríguez Santana, etc.:Lcdo. Féliz A. Toro, Jr.

Lcdo. Carlos Teissonniere León

Abogados de la AEE: Lcdo. Pedro Toledo González, Lcdo. Adalberto Alomar Rosario

Abogado de General Accident: Lcdo. José R. Goyco Amador

Abogado de Lab.

Clínico Cidreño:Lcdo. Edwin Torruellas Iglesias

Tribunal de Primera Instancia Sala, Superior de Ponce

Tribunal de Circuito de Apelaciones: Circuito Regional V

Juez Ponente: Hon.

Feliciano Acevedo

Fecha: 9/21/1999

Daños y Perjuicios

ADVERTENCIA

Este documento constituye un documento oficial del Tribunal Supremo que está sujeto a los cambios y correcciones del proceso de compilación y publicación oficial de las decisiones del Tribunal. Su distribución electrónica se hace como un servicio público a la comunidad.

Opinión de Conformidad emitida por el Juez Asociado señor FUSTER BERLINGERI, a la que se une el Juez Presidente señor ANDRÉU GARCÍA.

San Juan, Puerto Rico, a 21 de septiembre de 1999.

Nos toca determinar si la Autoridad de Energía Eléctrica procedió de forma diligente, de manera tal que merezca ser exonerada de toda responsabilidad en una situación en la cual la alta peligrosidad, de unas líneas eléctricas energizadas de alto voltaje que cayeron dentro de un río, fue ocasionada inicialmente por actos delictivos de terceros.

I

Temprano en la mañana del viernes 21 de junio de 1991, José A. León Rosario transitaba por la carretera núm. 139 del barrio Maragüez de Ponce en ruta hacia las oficinas de la compañía Las Piedras Construction, empresa para la cual trabajaba, ubicada en el barrio referido. Antes de llegar a su oficina, se percató de que había un poste de la Autoridad de Energía Eléctrica tirado en el suelo a la orilla de la aludida carretera núm. 139. También observó la presencia de aceite sobre el pavimento.

Una vez en su oficina, León Rosario puso a funcionar su computadora para comenzar sus labores, y notó que el voltaje estaba bajo, lo que afectaba el uso de la computadora. Procedió entonces a llamar a su jefe, José A. Soto, por radio teléfono y le explicó el problema que estaba confrontando. Soto le indicó que acudiera a la oficina de la Autoridad de Carreteras, ubicada en la misma carretera núm. 139, cercana a la oficina de Las Piedras Construction, y que de allí llamara a las oficinas de la Autoridad de Energía Eléctrica, para informarle a esta agencia tanto el problema del voltaje como el del poste caído. Así lo hizo León Rosario. Sin embargo, en su conversación telefónica con un funcionario de la Autoridad de Energía Eléctrica no pudo informarle el lugar exacto donde estaban ubicadas las oficinas de Las Piedras Construction ni aquel donde se encontraba el poste caído, por desconocer estos datos. Por tal razón, cuando el empleado de la Autoridad de Energía Eléctrica que contestó la llamada inquirió sobre el particular, León Rosario le indicó que era en el sector Los Fondos del barrio Maragüez. Le indicó, además, que cuando acudieran al lugar para investigar las averías, se detuvieran en las oficinas de la Autoridad de Carreteras para que allí les explicaran donde quedaban las oficinas de Las Piedras Construction, en las cuales le darían detalles más precisos sobre los problemas informados. Esta llamada fue anotada como recibida por el despachador de servicios de la Autoridad de Energía Eléctrica a las 8:40 a.m. de ese día.

Antes de la llamada de León Rosario, cerca de las 7:35 a.m. del mismo día, la Autoridad de Energía Eléctrica había recibido otra llamada telefónica mediante la cual se le informó sobre un problema de bajo voltaje en el área de la represa Cerrillos, ubicada en el Km. 6 de la misma carretera núm. 139 del barrio Maragüez de Ponce, donde realizaba trabajos el Cuerpo de Ingenieros del Ejercito de Estados Unidos.

Ese mismo día, una brigada de tres empleados de la Autoridad de Energía Eléctrica fue hasta la represa Cerrillos, preguntaron a algunos empleados sobre el problema de bajo voltaje referido, inspeccionaron el área haciendo una serie de pruebas, y subieron hasta los montes de los alrededores donde se encontraban localizados postes de energía eléctrica. Mientras realizaban la inspección sobre el asunto del bajo voltaje en dicho lugar, recibieron una llamada del despachador de la Autoridad de Energía Eléctrica notificándoles de una queja recibida sobre un poste caído en el sector Los Fondos y dándoles como referencia la oficina de la Autoridad de Carreteras. El despachador omitió indicar que preguntaran por la localización de la oficina de Las Piedras Construction; tampoco informó a la brigada el problema de bajo voltaje que afectaba a esta empresa.

La brigada acudió hasta la caseta de la Autoridad de Carreteras y allí preguntaron si sabían dónde había un poste caído. Un empleado les indicó que había uno a orillas de la carretera del sector Los Fondos. Los miembros de la brigada se dirigieron entonces al lugar indicado. Allí encontraron dos pedazos de poste cerca del pavimento y los movieron hacia la orilla. La brigada entonces notificó al despachador de la Autoridad de Energía Eléctrica que los pedazos de poste no entorpecían el tránsito en la carretera ni representaban peligro, pues no estaban energizados, y solicitaron que enviaran otra brigada para recoger los pedazos de poste referidos. Esta llamada se registró en la bitácora de la Autoridad de Energía Eléctrica a las 10:00 a.m. Posteriormente, los empleados de la brigada volvieron al área de la represa y continuaron investigando el problema del bajo voltaje que desde allí se había informado. La brigada no pudo encontrar la causa de éste.

Aproximadamente a las 11:30 a.m. del mismo día, León Rosario volvió a llamar a la Autoridad de Energía Eléctrica al percatarse de que no habían llegado empleados de esta agencia a las oficinas de Las Piedras Construction a investigar su queja previa sobre el problema que experimentaba con el voltaje y sobre el poste que continuaba caído en la carretera núm. 139. El despachador de servicios le constestó a León Rosario que ya se había enviado una brigada al área. La brigada a la que se refería el despachador era la misma que, una hora y media antes, había informado haber encontrado y movido hacia la orilla de la carretera dos pedazos de poste no energizados en el sector Los Fondos.

Al día siguiente, la Autoridad de Energía Eléctrica recibió otra llamada mediante la cual se informó que continuaba el problema de bajo voltaje en el área de la represa Cerrillos. Aproximadamente a las 8:00 a.m., se volvió a enviar una brigada al lugar. Los empleados de la Autoridad de Energía Eléctrica investigaron el área y, nuevamente, abandonaron el lugar alrededor de las 11:25 a.m. sin encontrar la causa del problema de bajo voltaje. Poco más tarde, a la 1:00 p.m., se recibió una tercera queja desde la represa referente otra vez al problema del voltaje. Una vez más se envió una brigada para investigar el problema en el área de la represa pero la búsqueda no rindió frutos. Los empleados examinaron también las líneas en la salida de la sub-estación a la entrada del barrio Maragüez pero no encontraron la causa del problema referido. Aproximadamente a las 3:30 p.m., la brigada abandonó el área.

El domingo 23 de junio de 1991, alrededor de las 3:00 de la tarde, los esposos Francisco Vega Marrero y Mariana Rodríguez Santana, de 55 y 35 años de edad, respectivamente, su hijo Martín Vega Rodríguez, de 12 años, y un amigo de éste, José Antonio Velázquez Blanco, de 14 años, se encontraban en el Río Maragüez de Ponce, a la altura del Km. 11 de la carretera núm. 139 antes mencionada. Los niños se fueron caminando río arriba mientras que don Francisco y doña Mariana se quedaron abajo. Luego de un rato, don Francisco y doña Mariana extrañaron la presencia de los niños y comenzaron a buscarlos por los alrededores del río. En la búsqueda, se toparon con Héctor Manuel Ruiz Rueda, quien también se encontraba pescando y disfrutando con su familia en el río, quien les informó que no había visto a los dos niños. Minutos más tarde, Ruiz Rueda oyó unos gritos y corrió río arriba hacia donde habían caminado don Francisco y doña Mariana en la búsqueda de los niños. Al acercarse al área, vio a doña Mariana que caminaba por el río, en un área donde el agua le llegaba a nivel de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba
139 temas prácticos
139 sentencias

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR