48 horas Praga

República checa

. Mejor comenzar por lo alto para continuar el día cuesta abajo. Los tranvías 22 y 23 llegan hasta el Barrio del Castillo Hradcany, el más antiguo de Praga.

. Allí, el monasterio barroco de Strahov es la primera parada. El camino que sigue hasta llegar al palacio Czernin -actual Ministerio de Asuntos Exteriores se abre a una vista general sobre la imponente iglesia de Loreto, importante centro de peregrinación de Praga que alberga una réplica de la Santa Casa donde vivió la Virgen María en la ciudad italiana de Loreto.

. Si eres aficionado al arte te gustará ir al Palacio Schwarzenberg, hoy propiedad de la Galería Nacional de Praga y conserva las obras más importantes del barroco checo.

. Pocos pasos más adelante, siempre en el mismo circuito, el Castillo de Praga, donde cientos de turistas se amontonan a las 12 del mediodía para presenciar el cambio de guardia. Con una superficie de 70,000 metros cuadrados, figura en el libro de récords Guinness como el castillo medieval más grande del mundo y es uno de los puntos más fotografiados de Praga.

. Hacia el norte, el Callejón de Oroes el recorte de una ciudad detenida en el tiempo. Desde hace pocos años dejó de ser un paseo gratuito y hoy su acceso está incluido con el boleto para visitar la catedral. A través del legendario caminito checo de alquimistas y orfebres se puede espiar una decena de casas para conocer cómo vivía la gente durante los últimos cinco siglos y entrar, entre estas la #22-, hogar de la hermana del escritor Franz Kafka, quien también vivió y escribió allí.

. La primera calle para apuntar es Nerudova, que se aleja de Hradcany para acercarse a Mala Strana o el Barrio Pequeño. Por Nerudova las coloridas fachadas atraen la atención y los portales de las casas que antiguamente no utilizaban el sistema de numeración todavía conservan los

. El Barrio Pequeño es la zona barroca por excelencia. Allí se encuentra la tan visitada iglesia de Santa María de la Victoria, a la que cada día cientos de creyentes concurren para adorar a la estatuilla de 45 centímetros del Niño Jesús, quien bendice con una mano, mientras con la otra sostiene el mundo.

. Para almorzar comida típica y cerveza checa, una opción interesante es Lokal (Mísenská 66/12). Allí se puede probar pecena kachna (pato asado) o svickova (salsa agridulce con crema y carne vacuna), cada plato por unas 120 coronas checas. De sobremesa, ideal caminar por U Luzickeho Seminare, la calle más estrecha del mundo. El...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR