Admite problemas en oficina
Por Alba Y. Muñiz Gracia
amuniz@elnuevodia.com
Los cambios -precedidos por el establecimiento de tres salas judiciales especialidades en violencia doméstica en las regiones de San Juan, Bayamón y Utuado- se han concentrado en la Policía, con los adiestramientos en violencia doméstica que recibieron los 700 cadetes que recién se graduaron de la Academia de la Policía.
De esos, 30 cadetes fueron certificados en el manejo de casos de violencia doméstica y 28 asignados a las unidades especializadas.
Los talleres se extenderán al resto de los miembros de la Uniformada, gracias a una alianza establecida con el superintendente Emilio Díaz Colón.
En medio de la espiral de violencia contra la mujer, la procuradora conversó con El Nuevo Día sobre sus planes para la Oficina de la Procuradora de las Mujeres (OPM).
Entre las organizaciones de mujeres existe la percepción de que el trabajo en la OPM está estancado.
Cuando llegué, esta oficina llevaba algún tiempo en el que se cambió mucho de director y, cuando tú cambias mucho de jefe, eso afecta el funcionamiento. Poder organizar para cumplir con la ley en todos esos aspectos toma tiempo. Cuando yo llego aquí, tengo que bregar con 50 problemas que están ocurriendo a la vez y tengo que irlos trabajando, dando prioridad a los más urgentes, pero los tengo que trabajar todos y eso toma tiempo.
¿La OPM tiene el presupuesto y el personal necesario para cumplir con su rol?
Nunca es suficiente. A las entidades sin fines de lucro (albergues, centros de ayuda, etc.) se les asignaron $ 2.1 millones. Nunca se había asignado tanto dinero a las entidades. Y del fondo federal Stop VAWA (Stop Violence Against Woman Act) se asignaron sobre $ 500,000 para trabajar con la violencia doméstica.
¿Qué necesita la OPM para ser un agente de cambio real?
Más recursos humanos porque la situación social ya ha llegado a unos niveles de emergencia y requiere mayor intervención. Necesitamos más personal para poder llegar a muchos más sitios y divulgar la función nuestra, porque los estudios han reflejado que cuando la víctima se decide a contar lo que está pasando, la primera con la que habla es una amiga o un compañero de trabajo y esa persona tiene que saber cuáles son las alternativas, qué es lo que se debe hacer.
¿Cuáles son sus planes a largo plazo?
La creación de las oficinas regionales en la mayoría de los distritos judiciales, la ampliación de servicios para las víctimas sin hogar e impactar el área de la educación a gran...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba