Aterriza nueva amenaza aérea

Por Yalixa Rivera y Joanisabel González

yrivera@elnuevodia.com

Asimismo, la movida podría significar el cierre absoluto de las torres de control en los aeropuertos Rafael Hernández (BQN), en Aguadilla, e Isla Grande (SIG), según fuentes de este diario.

La decisión, que se haría efectiva en abril, supo El Nuevo Día, implicaría que las aerolíneas tendrán que hacer múltiples ajustes para asegurar la continuidad de sus operaciones y, posiblemente, que miles de pasajeros tendrán que hacer cambios de última hora o llenarse de paciencia ante múltiples retrasos. Pero, sobre todo, la decisión podría convertirse en otro golpe a una economía que vuelve a contraerse.

De acuerdo con un informe de la Asociación Nacional de Controladores de Tráfico Aéreo (Natca, en inglés), sindicato que acoge a esos profesionales en todo Estados Unidos, la FAA podría cerrar unas 238 torres de control y eliminar el turno nocturno en otros 77 aeropuertos.

El LMM -que se identifica bajo las siglas SJU- figura en la lista de cierres nocturnos.

Irene Rocafort, gerente general de Aviación de la Autoridad de los Puertos, confirmó que aproximadamente 22 vuelos podrían verse afectados si se incluye a Puerto Rico en el plan de recortes.

"Estos son los vuelos que operan en el horario de 12:00 a.m. a 6:00 a.m.", informó Rocafort.

Pero explicó que no será hasta finales de marzo, fecha que tienen las agencias para someter su plan de recortes, que se sabrá con exactitud las repercusiones finales del secuestro.

"Las agencias federales tienen que buscar reducir sus gastos en un 5%. Una vez cumplan con ese plan, es que sabremos con exactitud cuáles y quiénes se impactarán", dijo Rocafort.

Las medidas son el resultado del impasse entre la administración del presidente Barak Obama y los republicanos en el Congreso, que impone un ajuste presupuestario de $85,000 millones.

Entre las medidas contempladas se propone recortar el equivalente a un día de trabajo a unos 47,000 empleados, incluyendo gerenciales.

Además, se está considerando la reducción de trabajos de mantenimiento preventivo y apoyo al equipo de la agencia.

"Sabemos que el secuestro va a afectar a todas las agencias federales por igual y aquí (en el aeropuerto) están todas. Para sacar y recibir vuelos se necesitan todas, no solo son los empleados de la torre de control", señaló Rocafort.

Entre las agencias federales que trabajan en el aeropuerto están la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA, en inglés), Aduanas...

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