A CUIDAR NUESTRO BUEN AIRE

Por Gloria Ruiz Kuilan

gruiz@elnuevodia.com

"Puerto Rico debe sentirse orgulloso que dentro del panorama ambiental cumple con todas las normas federales de calidad de aire. Digo esto porque tenemos muchos problemas ambientales adicionales como la calidad del agua y el manejo de la basura", señaló el director de la Agencia federal de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), Carl Soderberg.

Recordó que para la década del 70 otros vientos soplaban en Puerto Rico: los contaminados. Los parámetros de medición de particulado en el aire -con el pasar del tiempo- son más estrictos y advirtió que seguirán en esa ruta. "Actualmente cumplimos con el PM 2.5 micra (tamaño del material particulado en el aire que es tan fino que la nariz no lo puede atrapar)", dijo.

El presidente de la Junta de Calidad Ambiental, Pedro J. Nieves Miranda, reconoció que la Isla cumple con los estándares federales de calidad de aire. Pero advirtió que no se puede bajar la guardia ya que hay nuevos desafíos.

"No podemos quedarnos ahí. Hay sustancias que no están reguladas. Eso exige que nosotros trabajemos de manera proactiva para atender esas fuentes mayores de emisión", dijo.

En la Isla se producen -entre industrias, farmacéuticas y empresas- 78,000 toneladas de contaminantes al año. La Autoridad de Energía Eléctrica es quien más contaminantes emite al aire con 63,000 toneladas, según precisó el Presidente de la JCA. "Tenemos que reducir esas emisiones de nuestras termoeléctricas", dijo.

Cada minuto en Puerto Rico se generan 40 toneladas de dióxido de carbono producto del proceso para generar energía. Igualmente, los puertorriqueños son expertos en alumbrar el espacio y, por ende, producir contaminación lumínica, dijo la bióloga Olga Ramos. "Somos de 'shining star'", sostuvo sobre Puerto Rico.

Para el toxicólogo y catedrático de la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico, Braulio Jiménez, el contenido del material particulado que mide la EPA debe ser estudiado porque "pueden haber contaminantes que no se están midiendo".

"Eso no quiere decir que nuestro aire esté malo. Lo que quiere decir es que nosotros deberíamos tener más capacidad para muestrear algunos contaminantes en el aire", dijo Jiménez, quien hace estudios en el Laboratorio de Toxicología del Centro de Estudios Ambientales y Toxicológicos de la Escuela de Medicina. "En esos contenidos podemos ver si hay materiales que son carcinógenos y podían inducir a...

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