Dinero y política: agenda inconclusa

LUIS A. MATOS GONZÁLEZ

PROFESOR DE CIENCIAS POLÍTICAS

Los sistemas de financiamiento político contienen el marco legal que regula los ingresos (públicos o privados) y egresos de los partidos políticos que son utilizados tanto para sufragar los costos de las campañas políticas como su funcionamiento ordinario. Ha sido una tendencia generalizada hacer reformas dirigidas a establecer estas regulaciones. Por ejemplo, el 88% de los países de América Latina cuentan con marcos legales en esta dirección. Desde el año 1957 Puerto Rico ha contado con diversos marcos que regulan el financiamiento político.

La existencia de legislación no ha sido garantía de la ausencia de escándalos vinculados a la desproporción de la relación entre el dinero y política. Al evaluar nuestro marco legal no podemos caer en la trampa de analizar los objetivos propuestos; todo lo contrario, debemos escudriñar el grado de eficacia de las normas y los efectos no deseados que se generan en la implementación.

Es imperativo encontrar un equilibro en los valores de nuestra cultura política que trascienda por mucho al tradicional consenso partidista. A fin de cuentas, el mejor sistema de financiamiento político es el que puede mantener unas normas estables de competición y que a su vez, concurre con los valores y aspiraciones de los ciudadanos que conforman la comunidad política.

Urge reformar nuestro sistema con la...

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