Historia de nunca acabar

El escándalo más reciente de Hollywood ha destapado el deplorable abuso de poder que han utilizado importantes ejecutivos para hostigar, intimidar y abusar a artistas, y de paso arruinar sus carreras.

El pasado fin de semana el productor, Harvey Weinstein, fue despedido de la casa productora que fundó, The Weinstein Company, luego de que salieran a relucir testimonios de algunas de sus víctimas.

La actriz Ashley Judd, es una de las primeras que se atrevió a señalar al poderoso productor, dueño también de Miramax.

En una entrevista, la protagonista de “Someone Like You”, relató cómo hace 20 años el productor la citó en un hotel de Beverly Hills. Lo que pensó que era un desayuno de negocios se convirtió en una desagradable experiencia, cuando Weinstein le pidió que subiera a su habitación y le ofreció darle un masaje y le solicitó si podía verlo bañarse.

Actrices como Gwyneth Paltrow y Angelina Jolie afirmaron también haber sido hostigadas por el productor. Mientras que Mira Sorvino y Rosanna Arquette aseguran que por haberse negado a las peticiones de Weinstein, sus carreras fueron tronchadas. Otros informes indican que hay actrices que llegaron a acuerdos monetarios con el ejecutivo, como por ejemplo, Rose McGowan, para no llegar a tribunales.

Y está el caso de la actriz y directora italiana Asia Argento, quien en una de sus películas incluyó una escena que representa la experiencia que tuvo con el productor, quien le hizo sexo oral forzosamente.

Este es el caso más reciente de un fantasma que ha enfrentado la industria del entretenimiento desde sus comienzos, al igual que se ve en muchas carreras.

La actriz, Johanna Rosaly, es muy enfática al destacar que no solo las actrices son víctimas de estas situaciones, pues los actores también las enfrentan.

“No se trata solamente de las actrices, los varones también son víctimas de acoso sexual. Y es menos hablado, porque es más bochornoso, porque se entiende que el varón siempre está dispuesto y deseoso, y no necesariamente ese es el caso, venga de un acercamiento homosexual o heterosexual”, destacó.

A Weinstein se le atribuye haber tenido este mal comportamiento por 30 años.

En ese aspecto, Johanna destaca que lamentablemente no siempre éstos casos salen a la luz pública, de modo que algunos pagan sus errores, mientras que otros jamás. “Por ejemplo, en Puerto Rico no ha salido quién era el que estrenó lo que llaman en Estados Unidos el ‘casting couch’. Eso nunca ha salido y sin embargo, sí...

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