Justifica acusación a de los Santos

Por Cynthia López Cabán

cynthia.lopez@gfrmedia.com

Mientras, el equipo de la defensa siguió haciendo énfasis en las contradicciones del testimonio de Acosta y enfiló sus cañones hacia el esposo de la víctima, el exjuez del Tribunal Supremo, Carlos Irizarry Yunqué, quien encontró el cuerpo de su esposa en el suelo del apartamento que compartían en el condominio Laguna Terrace en el Condado, pero que no se incluyó en la lista de testigos de cargo.

En la continuación del juicio contra de los Santos por matar supuestamente a su jefa en concierto y común acuerdo con otra persona que no ha sido identificada, Acosta declaró ayer, a preguntas de la fiscal Elba Acevedo Pérez, que contaban con evidencia pericial "y una serie de entrevistas en que (la acusada) decía una cosa y en otra decía otra cosa totalmente opuesta".

Ante una objeción de la abogada Lucille Borges Capó, la jueza Eloína Torres Cancel instruyó al jurado a tomar la aseveración de las versiones encontradas como una conclusión del agente y no un hecho cierto. La evaluación sobre la veracidad de este asunto la hará el jurado cuando se retire a deliberar.

El agente declaró que "teníamos evidencia física, habíamos corroborado coartadas, habíamos hecho análisis de ADN para descartar personas, incluyendo al señor Carlos Irizarry Yunqué".

La Policía identificó una huella de la acusada en el cuchillo que se presume se usó para matar a Ortiz Ortiz, de 72 años. Pero en el cuchillo no se encontró material genético de la empleada doméstica, de 58 años, ni debajo de las uñas de la víctima, quien luchó aparentemente por su vida.

El teniente Acosta también indicó que al momento de someter los cargos contra de los Santos Pineda, no había evidencia para presentar cargos contra otra persona.

"Según nos narra el patólogo, es que una persona más robusta y fuerte la domina (a Ortiz) y la lleva al suelo y otra que no tuvo contacto físico con ella es quien la corta", planteó Acosta.

En torno a la coartada ofrecida por el esposo de la víctima y cuya sangre apareció en una camisa, un pañuelo y una toalla que se encontraba en la lavadora, Acosta respondió que el hombre, de 91 años, "estaba allí (en la Universidad) de 1:00 p.m. a 5:00 p.m."

El teniente dijo que llegó a esta conclusión, luego de entrevistar a estudiantes que participaban en los dos seminarios del entonces profesor universitario, más ver los vídeos de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR