Sentencia de Tribunal Apelativo de 20 de Febrero de 2007, número de resolución KLAN20061197
| Emisor | Tribunal Apelativo |
| Número de resolución | KLAN20061197 |
| Tipo de recurso | Apelación |
| Fecha de Resolución | 20 de Febrero de 2007 |
| TERESA CRUZ RIVERA Apelante v. EDIBERTO MÉNDEZ VALENTIN Apelada | | aPELACIÓN Procedente del Tribunal de Primera Instancia Sala Superior de Mayagüez Caso Núm.: KLAN2006-1197 Sobre: Divorcio |
Panel integrado por su presidente, el Juez López Feliciano, la Jueza Varona Méndez y el Juez Hernández
Serrano
López Feliciano, Juez Ponente
En San Juan, Puerto Rico a 20 de febrero de 2007.
Comparece la señora Teresa Cruz Rivera (en adelante, la apelante), solicitando que revisemos y revoquemos la sentencia emitida por la Sala de Mayagüez del Tribunal de Primera Instancia (T.P.I.), el 14 de agosto de 2006, notificada y archivada en autos el 16 de agosto siguiente. Con dicha sentencia se declaró sin lugar la demanda de divorcio por trato cruel instada por la apelante.
Examinados y estudiados los alegatos de las partes, la trascripción
del juicio en su fondo y el
derecho aplicable, resolvemos.
El 11 de marzo de 2005 la apelante presentó demanda de divorcio por la causal de trato cruel en contra de su esposo, el señor Heriberto
Méndez Valentín. Éste último contestó la demanda y, a su vez, reconvino por la causal de trato cruel.
Tras varios trámites procesales, el T.P.I. celebró la vista en su fondo el 27 de junio de 2006. La apelante ofreció su propio testimonio en apoyo de las alegaciones contenidas en la demanda. El apelado no presentó testigos ni prueba documental a su favor.
La apelante declaró, en apoyo a las alegaciones de trato cruel, que contrajo matrimonio con el apelado en el 1994, y ya en el 1996, cuando iba a tener su segundo hijo, su esposo le fue infiel con otra mujer. En esa ocasión expresó que lo perdonó. Indicó, que le había sido infiel en otras dos ocasiones, pero que ello había ocurrido porque ella lo había permitido. Añadió que en el mes de octubre de 2003 le indicó a su esposo, quien es Policía de profesión, que se fuera de la casa porque no veía que éste tuviera compromiso, toda vez que hacía dos años y medio que no trabajaba, y era ella quien sostenía el hogar.
Arguyó, además, como parte de los hechos en que apoyó la causal de trato cruel, que su esposo había contraído obligaciones económicas a nombre de la sociedad de gananciales sin su consentimiento. Alegó, que éste falsificó su firma al solicitar un préstamo, toda vez que no recordaba haber firmado documento alguno a esos efectos.
Por otro lado, indicó que en dos ocasiones cuando a su esposo le tocó disfrutar de las relaciones paterno filiales1 con sus hijos le acompañaba una mujer. Expresó que su esposo les presentó a la señora como su amiga, la besó en la boca, se pusieron a bailar reggaeton
y le pasaba su trasero por sus partes a él en la presencia de mis hijos porque ellos me lo contaron.
No obstante, en el turno del contrainterrogatorio, la apelante declaró que a pesar de las múltiples ocasiones en que el apelado le fue infiel, ella lo había perdonado. Adujo además, que aún cuando se encontraban separados salieron en dos ocasiones y han compartido como marido y mujer.
En cuanto a las relaciones...
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