Marejada feliz

RINCÓN.- Raymond King, un reconocido surfer de calibre internacional, había escuchado historias fascinantes de aquella marejada de 2008 que llegó a Puerto Rico y que fue un sueño para todos los que practican ese deporte.

Por eso, tan pronto supo que el singular fenómeno se repetiría este año en Puerto Rico, no lo pensó dos veces. Agarró su tabla y su traje de baño y viajó hasta la isla, específicamente a Rincón, a esperar a que el fenómeno marítimo se manifestara.

No se arrepintió.

“¡Fue la experiencia de mi vida! ¡Algo increíble! Es de esas cosas que pasan muy pocas veces. Las olas estaban altísimas. Había muchos surfers experimentados y la gente estaba muy feliz en el agua”, expresó King en conversación telefónica con El Nuevo Día.

“No estuve en el 2008 y siempre me hablaron de que las olas eran inmensas. Por eso quería vivirlo en persona y fue grandioso”, repitió.

Y es que, tan pronto el sistema frontal que se originó a principios de mes se dirigió hacia el sur y los vientos alisios cambiaron de dirección del oeste al noroeste, los surfers del mundo sabían que la gran marejada que estaban esperando por los últimos diez años por fin llegaría a las costas de Puerto Rico.

Y fue así como desde el domingo, 4 de marzo, hasta finales de esa misma semana, el mar se manifestó con toda su potencia en el norte de la isla.

La noticia se regó rápidamente y los practicantes de ese deporte de distintas partes del mundo se trasladaron a la isla para unirse a los locales y disfrutar del tan anhelado espectáculo natural.

“Los primeros días el mar estaba muy picado, pero a partir del martes (6 de marzo), se organizaron las olas y fue excelente. Nunca antes había surfeado olas así de grandes en Puerto Rico y fueron algunas de las mejores que he visto”, recalcó el joven deportista, que apenas cumplió esta semana 25 años y quien tiene un fuerte vínculo con Puerto Rico, pues fue aquí, a los 5 años, cuando por primera vez montó una ola.

La noticia se dispersó por el mundo. Publicaciones especializadas en este deporte resaltaron las enormes olas que se registraron en la isla y varios de los atletas extranjeros también contaron sus experiencias.

“Experiencia agridulce”

Irónicamente, mientras Rincón se convertía en el paraíso para aquellos que sienten correr la adrenalina maniobrando con una tabla sobre una ola, en otras partes de la isla las inundaciones costeras y el fuerte oleaje hicieron estragos, algo que no pasó desapercibido.

“Por un lado, la experiencia es...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR