María marcará un hito en la historia de la isla
Un hito en la historia del país se marcará hoy cuando el huracán más poderoso en 89 años, María, toque tierra en la zona sureste, temprano en la mañana, con vientos máximos sostenidos de 175 millas por hora, según los pronósticos meteorológicos.
Al cierre de esta edición, el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) proyectaba que el ojo de María entrará por Guayama a las 8:00 a.m., y saldrá, a las 4:00 p.m., por Hatillo.
Bajo este escenario, los efectos y daños a consecuencia del viento, lluvia, marejada ciclónica, inundaciones, derrumbes y hasta tornados serán “extremos” y “devastadores”, advirtieron ayer el gobernador Ricardo Rosselló y los expertos del Servicio Nacional de Meteorología (SNM).
Ernesto Morales, coordinador de avisos del SNM, indicó que caerán entre 12 y 18 pulgadas de lluvia, con acumulaciones de hasta 25 pulgadas en zonas aisladas. Las lluvias, que comenzaron ayer a media mañana, durarán hasta el viernes o sábado.
Morales precisó que los vientos huracanados se extienden a 35 millas del centro de María, por lo que todo el país los experimentará, sean en ráfagas o de forma sostenida. Los vientos de tormenta tropical se extienden a 140 millas del centro.
“El jueves (mañana) todavía no es seguro (estar en la calle). Habrá tiempo inestable hasta el sábado. Debemos mentalizarnos para estar de 72 a 90 horas acuartelados y seguros”, expresó, por su parte, Rosselló.
Hasta último minuto, el primer ejecutivo mantuvo su mensaje a la ciudadanía de desalojar las zonas vulnerables y buscar un sitio seguro para pasar el huracán.
“La propiedad se puede arreglar después, pero las vidas no se pueden sustituir”, aseveró.
INFRAESTRUCTURA
En cuanto a la continuidad de los servicios básicos, Rosselló fue enfático en que “no va a haber energía eléctrica” tras el paso del huracán María.
“¿Cuánto va a demorar? Dependerá de la magnitud del daño”, dijo, al señalar que la infraestructura eléctrica está “muchos más vulnerable y debilitada” que, por ejemplo, cuando los huracanes Hugo y Georges azotaron la isla en 1989 y 1998, respectivamente.
Añadió que, a diferencia de esos años, la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) cuenta ahora con menos empleados para “levantar” el sistema.
Ante la alta probabilidad de que los 1.5 millones de clientes de la AEE estén “un buen tiempo” a oscuras, Rosselló anunció que estaba “negociando” con la Agencia Federal de Manejo Emergencias (FEMA, en inglés) para traer a la isla generadores eléctricos y personal para...
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