No ven ningún avance en el proyecto piloto

En mayo de 2019, la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) sorprendió al país con la designación de los 78 municipios como entidades cubiertas bajo la ley federal Promesa, al argumentar que, de esa manera, procuraba "asegurar su viabilidad fiscal a largo plazo".A esos fines, escogió 10 municipios para impulsar un proyecto piloto para examinar su salud fiscal y presupuestaria.Sin embargo, transcurridos casi dos años, los alcaldes de esos 10 municipios consideran que la iniciativa no ha sido beneficiosa, ni ha redundado en grandes avances porque entendían que la JSF viabilizaría ayudas económicas y serviría de enlace con el gobierno central para canalizar sus reclamos.El proyecto abarcaba los pueblos de Aibonito, Barranquitas, Camuy, Comerío, Orocovis, San Sebastián, Villalba, Quebradillas, Isabela y Cidra. Los últimos dos cambiaron de administración tras los pasados comicios.El Nuevo Día consultó, por separado, con los alcaldes, quienes coincidieron en que la JSF ha demostrado total desconocimiento del funcionamiento y operación del aparato municipal."Sin duda, no es lo que nosotros esperábamos", dijo el exalcalde de Cidra y aún presidente de la Junta de Gobierno del Centro de Recaudación de Ingresos Municipales (CRIM), Javier Carrasquillo."No vemos que era lo que habían intencionado (sic) originalmente, que ellos querían entender cómo funcionaban las finanzas de los municipios, que querían ver cómo podían fortalecerlo, y lo que hemos recibido es golpe tras golpe", sostuvo el ahora asesor del gobernador Pedro Pierluisi en asuntos municipales.Los alcaldes repudian la injerencia de la JSF en sus finanzas y la imposición de planes fiscales y presupuestos que redujeron nómina y beneficios marginales, en particular el pago del bono de Navidad.Ante ello, Germán Ojeda, director de Asuntos Municipales y Legislativos de la JSF, sostuvo que, si el municipio ahorra e identifica el dinero para el bono, pueden pagarlo, como hicieron en diciembre.Insistió en que lo que persiguen con el proyecto piloto es aumentar los ingresos de los municipios, maximizar el uso de los fondos federales, lograr la consolidación de algunos de los servicios entre los pueblos con el fin de reducir o controlar los gastos y promover esfuerzos de colaboración."Lo que hemos esperado es trabajar colaborativamente para el beneficio de los municipios y su gente. Si no lo pueden ver de esa manera, pues seguiremos intentando", enfatizó Ojeda.Aun así, los alcaldes se mantienen en vilo porque...

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