Pueblo V. Pagan Santiago 1992, 130 D.P.R. 470
| Autor | Dra. Ruth E. Ortega-Vélez |
| Páginas | 409-411 |
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Evidencia Directa e Indirecta. Duplicado de Orden de Allanamiento. Hechos: En octubre de 1987, el agente Félix Bauzá Carrasquillo recibió una llamada telefónica anónima de una mujer, quien le informó que en la residencia de "Georgie El Grande" se ocultaba cierto cargamento de droga; describió la localización de la residencia, y se comprometió a llamar nuevamente. La confidente llamó dos días después e informó al agente Bauzá sobre una transacción que se realizaría esa misma tarde en la referida residencia. En esta ocasión informó la hora, el número de personas involucradas y describió el vehículo que sería utilizado.
El agente Bauzá estableció vigilancia frente a la residencia de Pagán Santiago. Acto seguido un hombre, quien luego fue identificado como Jorge L. Pagán Santiago, salió de la referida residencia. Este, luego de saludar a los pasajeros del vehículo, sacó de una cartera de mano, negra, una bolsa plástica transparente conteniendo un polvo blanco. La entregó a uno de los individuos que viajaban en el vehículo, quien de la cartera de una de las mujeres sacó dinero y lo entregó a Pagán Santiago. Acto seguido el vehículo se retiró del lugar y Pagán Santiago caminó hacia su residencia. En ese momento el agente Bauzá se percató de que un segundo individuo, identificado luego como Rafael Santiago Martínez, estaba mirando desde el segundo piso de la casa y lo había descubierto. Este le gritó a Pagán Santiago a la vez que señalaba hacia el lugar donde se hallaba el agente Bauzá. Pagán Santiago corrió hacia el interior de su casa.
Bauzá se retiró del lugar de los hechos. Al salir de la urbanización alcanzó el vehículo que segundos antes había estado en frente de la casa de Pagán Santiago. El agente notificó por radio a su supervisor, quien se encontraba cerca del lugar,
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y solicitó que arrestaran a los ocupantes del vehículo. Posteriormente, el agente Bauzá se enteró de que, en efecto, el vehículo había sido intervenido y arrestados sus ocupantes habiéndoseles ocupado aproximadamente dos onzas de cocaína.
El mismo día, la informante llamó por tercera ocasión. Esta vez informó que en la residencia quedaba todavía una cantidad de drogas y armas de fuego, y que probablemente Georgie El Grande se había dado cuenta de la presencia de la policía en los alrededores de su residencia, por lo que trataría de movilizar el cargamento ilegal que guardaba en su propiedad.
Con la información suministrada por la confidente anónima...
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