Reencuentro 44 años después de la guerra

Por Gerardo E. Alvarado León

galvarado@elnuevodia.com

A las 2:28 p.m., Britts y Freeman, provenientes de Estados Unidos, pisaron suelo boricua y se confundieron en un abrazo con Matos quien, de los tres, recibió las peores heridas. Había un cuarto soldado estadounidense, el chofer del tanque-ambulancia en el que se desplazaban por Vietnam, pero no han podido dar con su paradero.

Britts, quien llegó en pantalones cortos, aún exhibe en su rodilla izquierda las cicatrices que le dejó el ataque. "No me he recuperado completamente, siempre tengo dolor y tomo medicamentos", cuenta al recordar que estuvo seis semanas hospitalizado. No regresó al escenario de guerra.

La historia de Matos es parecida. Sus rodillas se quebrantaron. Pasó un año hospitalizado y fue operado en tres ocasiones. Tampoco volvió a la guerra. A su regreso a la Isla estudió periodismo.

Freeman recibió heridas leves. "Por eso estuve solo un día en el hospital y volví al campo de batalla. Estuve todo un año en Vietnam", recuerda.

Ninguno se conocía de antes. Acabaron en la guerra porque el servicio militar era obligatorio. Coincidieron en San Antonio, Texas, mientras se adiestraban como paramédicos de batalla.

"Me arrepiento de cómo...

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