Sale caro el evasor de cuello blanco

Por Marian Díaz

mdiaz1@elnuevodia.com

La cifra emana de estimados de economistas consultados por El Nuevo Día y se basa en las contribuciones dejadas de pagar por corporaciones y profesionales de cuello blanco. No incluye las contribuciones dejadas de pagar por chiveros ni el dinero que generan actividades ilícitas, como el narcotráfico.

"Hacienda ha perdido esa batalla contra la evasión. Ese frente se ha reducido al hacer las amnistías", opinó el economista Luis Benítez, quien fue copresidente del comité de la Reforma Contributiva del año 2005.

Pese a que Hacienda no divulga estimados de cuánto deja de ganar por el concepto de este tipo de evasión anualmente, la agencia sí reveló a El Nuevo Día que entre 2009 y 2011, identificó 103 casos de evasores de cuello blanco, de los cuales ha procesado 45.

Según el propio secretario de Hacienda, Jesús Méndez, del total de esos casos, hay 41 contribuyentes que no reportaron sus ingresos y la deuda total asciende a $ 74.7 millones. Estos casos se refirieron al Departamento de Justicia.

Las formas de evadir contribuciones son variadas. Una de las más comunes se ve a diario en las oficinas y negocios que solo aceptan dinero en efectivo como pago.

"Si Hacienda quiere atacar la evasión, que vaya a las oficinas médicas", manifestó el economista José J. Villamil, economista y presidente de la Junta de Directores de Estudios Técnicos.

Las transacciones en efectivo, distinto a los pagos que se hacen con tarjetas de débito o de crédito, son más difíciles de seguirle el rastro, comentaron los economistas. Para Villamil, no existe otra razón, más allá de la evasión, para que una empresa solo acepte esa forma de pago.

Otra modalidad de evasión es el aceptar pagos en efectivo y no reportarlos a Hacienda. Puede ser que el negocio acepte distintas formas de pago, pero esconde o reporta una cantidad menor de transacciones en efectivo, lo que tiene el efecto de reducir la cantidad de ingresos registrados, y por ende el pago de contribuciones por ese concepto.

Según el economista Ramón Cao, experto en temas tributarios, otra modalidad que utilizan los evasores de cuello blanco es el inflar los gastos para pagar menos. "Deducen el yate, los viajes de placer y otros gastos que no son propios del negocio".

El Impuesto de Ventas y Usos (IVU) es otro de los mecanismos que emplean los evasores. Irónicamente, el IVU se implantó en el 2006 como un mecanismo de aumentar los recaudos del fisco, que iban en picada. A Hacienda se...

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