'Yo siempre canté'
por rosalina marrero-rodríguez
rosalina.marrero@gfrmedia.com
"Cuando yo me metía, mi prima (Chiqui) me decía: 'Cállate, que tú no sabes', entonces ahora ninguno de ellos canta, y el que canta soy yo", recuerda una de las voces puertorriqueñas más aplaudidas desde la década del 60 hasta la actualidad.
Armando Hipólito Avellanet González, de 72 años, pudo ser comediante y también alcanzar el éxito. El humor es tan natural en él como la fuerza que imparte a sus clásicos románticos Fugitiva, Magia blanca o Jamás te olvidaré.
"Cuando empecé a cantar, muchos compañeros me decían: '¿De dónde te salió a ti eso de cantar si tú lo que haces es comedia?", cuenta el artista, que solía escuchar en la emisora WKAQ a los pilares en el arte de hacer reír: José Miguel Agrelot, Yoyo Boing, Machuchal y Diplo. Luego creaba sus propios sketches, de lo que escuchaba de ellos.
Su nombre verdadero tiene poca relación con Chucho Avellanet, ¿quién lo llamó así?
Mi bisabuelo, el bisabuelo que conocí, porque mi bisabuela era viuda y yo no conocí a mi verdadero bisabuelo. El que conocí era italiano, se llamaba Pedro, pero el nombre en italiano era Pietro Nuccio. Él le decía Chucho a todos los muchachos.
Chucho tenía dos años cuando sus padres se divorciaron. Seis años más tarde, su mamá se volvió a casar y se mudó a San Juan, pero él permaneció en la Sultana del Oeste, al cuidado de sus otros padres, Marina y Luis.
¿En su familia había gente dedicada a la música?
Mi papá, que todavía vive. Tiene 94 años. Y tengo un tío que se llama Adolfo, que está en Nueva York, que siempre ha cantado tangos y le gustaban las milongas y esas cosas, y grabó discos. Pero fuera de eso, mi papá y otros tíos por parte de padre, cantan, pero en fiestas familiares. Mi papá toca un bandoneón y cada vez que habían las fiestas de Navidad se ponía a tocar. Por mi mamá no hay na' de eso.
¿Quién en su familia descubrió su talento para cantar?
Yo mismo. Yo siempre canté. En casa había una vitrola, de esas de pie grande, que usaba las agujas que usan ahora para poner cuadritos. Esas agujas las ponías y cada tantos discos había que cambiarlas...
¿Siempre inclinado hacia la música romántica?
Siempre. De todas maneras en casa se oía lo que estaba de moda y, ¿qué era lo que estaba de moda en aquel tiempo cuando yo era chiquito? Pues Bobby Capó, Daniel Santos, Libertad Lamarque; después cuando crecí, de adolescente, vino Lucho Gatica, Antonio Prieto y los tríos estaban de moda, Los Panchos, Los Tres...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba