Dan su último adiós al comerciante asesinado

Por Osman Pérez Méndez

operez@elnuevodia.com

Santín González, propietario del reconocido restaurante Sabores, ubicado en Hato Rey, supuestamente fue interceptado el pasado sábado -tras salir de su negocio- por Javier Alvarado Virella, un sujeto con antecedentes criminales. Su cuerpo apareció calcinado dentro del baúl de su carro, que había sido robado.

"Rolando fue un trabajador incansable, un tipo bien familiar, le encantaban los deportes, y era loco con sus hijos", dijo Enrique Grau Pelegrí, cuñado de Santín González y quien habló a nombre de la familia en la funeraria Ehret, a donde fueron llevados sus restos.

"Lo triste de este vil asesinato es que ocurre en un momento cuando estaba en la cúspide de su vida, donde ya tenía la madurez intelectual y la vida le sonreía comercialmente... y le tronchan su vida, innecesariamente, un hampón", dijo Grau, quien celebró que el presunto asesino hubiese sido atrapado con rapidez.

El portavoz dijo que la familia no quería hacer expresiones, pero que agradecían la labor de la Policía y la justicia estatal y federal.

Horas después que reportaran la desaparición de Santín González, la Policía detectó el carro robado en...

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