Zambrana V. Hospital 1980, 109 D.P.R. 517

AutorDra. Ruth E. Ortega-Vélez
Páginas639-642

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Evidencia Directa e Indirecta.

Hechos: El bebé Ramón Luis, de diez y siete días de nacido, fue ingresado en el Hospital Santo Asilo bajo el cuidado de su médico particular y especialista en pediatría, Dr. Luis H. Rodríguez. Su diagnóstico de gastroenteritis causada por la bacteria Escherichia coli fue confirmado mediante los correspondientes análisis de laboratorio. El tratamiento fue efectivo. El niño toleraba la alimentación oral que se le daba. En la mañana del 15, entre 7:30 y 8:00, el Dr. Rodríguez García volvió a visitar al niño y lo examinó. Lo halló curado y dispuso darlo de alta, lo que anotó en las órdenes médicas. No obstante, la madre del niño le indicó que había evacuado y para tranquilizarla le dijo que se quedara en el hospital hasta la tarde, cuando viniera su esposo. No dispuso más medicación, excepto un antidiárreico si fuese necesario.

Adelaida Boothby, empleada del Hospital, quien a la sazón hacía 45 días que se había graduado de enfermería, entró a la habitación. Nunca había intervenido con el niño. Media hora después que el niño fue visto y hallado curado por el Dr. Rodríguez, esta enfermera dictaminó que se hallaba deshidratado. Sus notas al respecto aparecen apretujadas al final de la quinta página del récord o informe de enfermera, en contraste con las demás en dicho récord, que son claras, escritas en su mayoría a doble. La enfermera Boothby decidió que había que volver a ponerle el suero al niño. El suero había permanecido en su habitación desde la mañana del día anterior, expuesto al ambiente con sus tubos y la aguja hipodérmica que se habían usado. La madre protestó que el bebé había sido dado de alta. La enfermera contestó que ella sabía lo que hacía. Sin consultar al médico del niño ni a ningún otro médico, quitó los tubos y aguja al viejo suero, le puso tubos y aguja nueva, y lo inyectó en la vena al bebé. Dos horas más tarde, la condición del niño era crítica. Fue necesario ponerlo en cámara de oxígeno debido a que estaba cianótico. Los médicos convinieron que era un cuadro de septicemia. Falleció quince horas después de la intervención de la enfermera Boothby reinyectándole el suero.

Juan Ramón Zambrana y Digna Cruz instaron demanda por daños y perjuicios

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contra el Hospital Santo Asilo de Damas, responsabilizándolo por la muerte de su hijo recién nacido. Alegaron que la muerte fue causada por una infección generalizada o sepsis provocada al administrársele al bebé, por una enfermera...

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