DOLENCIAS laborales
Por Ileana Delgado Castro
idelgado@elnuevodia.com
Son solo algunas de las típicas actividades a las que se enfrentan a diario cientos de mujeres y hombres que laboran en distintas profesiones y que, de una u otra forma, aportan a la sociedad.
Son los mismos que también están expuestos a desarrollar ciertas dolencias debido a su oficio. Desde afecciones de los músculos, tendones, calambres y tortícolis, hasta trastornos de los vasos sanguíneos, fatiga visual y estrés. Sin contar otras enfermedades más severas, como algunos tipos de cáncer y problemas cardiovasculares, entre otras.
Se trata de las llamadas enfermedades laborales o profesionales, tan comunes entre la clase trabajadora de hoy. Especialmente entre los que laboran en empleos donde el mayor trabajo se realiza de forma sedentaria, sentados frente a una computadora. Aunque tampoco se escapan los que trabajan en la construcción, mecánicos, dentistas, deportistas, músicos y hasta bailarinas, entre otros.
Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en términos económicos, muchas de esas dolencias provocan que el 4% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial ($ 1.25 billones) se pierda a causa de los costos directos e indirectos relacionados con estas enfermedades.
Los dolores de cuello y de espalda, así como en las muñecas y los hombros, son algunas de las principales quejas entre los usuarios de computadora. De hecho, algunos estudios han encontrado que el riesgo de lesión comienza cuando una persona utiliza el teclado por más de 20 horas por semana. Algo que, sin duda, es muy común en estos tiempos. Precisamente, se cree que las generaciones más jóvenes que han crecido en la era digital, tienen más posibilidades de lesionarse debido al uso constante de la computadora y de otras tecnologías.
"Muchas lesiones se desarrollan por el sobreúso, ya sea de las manos, dedos, hombros y rodilla. Por ejemplo, un 'pitcher' eventualmente va a tener problemas en los dedos y los hombros. Mientras que un 'catcher' se puede lesionar la rodilla", señala el fisiatra Michael Hernández, del Caribbean Institute of Sport Medicine.
El especialista destaca que el cuerpo está diseñado para aguantar unas cargas de peso. Pero dice que hay áreas que están expuestas a movimientos repetitivos que van a sufrir más y, por lo tanto, se van a afectar. Un ejemplo claro de eso son las personas que trabajan a diario frente a una computadora.
"Muchos oficinistas sufren de lesiones asociadas a movimientos repetitivos con las manos, como la tendinitis de Quervain, una condición que...
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