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Por Mariana Lafont

Si hay buen clima, el ascenso al volcán comienza en el centro de esquí y, si bien no es una ascensión técnica, requiere tener buen estado físico, paciencia y voluntad. Antes de empezar, los guías explican cómo usar piqueta y grampones, necesarios en el tramo final donde siempre hay nieve o hielo. Desde los 1,900 metros se va en hilera y en zigzag, con pasos cortos y las paradas son más frecuentes. El almuerzo es en el galpón de la aerosilla con una gran panorámica: los lagos Villarrica y Caburga y los volcanes Llaima y Lonquimay. Desde allí, sólo restan 640 metros para la cima que suele estar cubierta por una gran nube con fuerte olor a azufre. Luego de la foto en la cima, se regresa haciendo culipatín (deslizarse sentados en una manta) y en sólo dos horas se llega a la base.

Y para quienes gozan las termas, en Pucón hay muchos complejos en medio de frondosos bosques nativos, como las termas de Huife, las de Menetúe o el Complejo Termal San Luis. La mayoría de los centros cuenta con piscinas al aire libre y techadas, piscinas hidroterapéuticas y se puede ir a pasar el día o dormir en cabañas.

Panguipulli significa, en mapuche, "tierra de leones" pero por sus miles de rosales plantados se la conoce como "la ciudad de las rosas". Esta tranquila comunidad está en la mayor cuenca hidrográfica de Chile con los lagos Panguipulli, Calafquen, Pirihueico, Riñihue, Neltume, Pellaifa y Pullinque. Su historia se remonta a 1890 con el arribo de misioneros capuchinos y de los primeros pobladores quienes levantaron la llamativa iglesia de estilo europeo que está frente a la plaza. Pero la historia de Panguipulli y la de los vecinos Liquiñe y Neltume está estrechamente ligada a la industria maderera. En el esplendor de la década de 1950, el lago Panguipulli fue el principal medio de transporte de carga y pasajeros y toda la región recibió miles de chilenos buscando trabajo y progreso hasta que vino la dictadura.

Como en otros puntos de Chile, aquí también hay varias termas, abiertas todo el año, en la zona de Coñaripe y Liquiñe. Partiendo de Coñaripe, en tierras del Parque Nacional Villarrica, están las Termas Vergara. Un poco más adelante están las Termas Geométricas, espectacular complejo en medio de una quebrada donde se ha combinado armónicamente arquitectura y naturaleza y con pozones tallados en la roca. A 55 kilómetros de Panguipulli, está Liquiñe, pequeño pueblo campesino que alberga ocho centros termales como los de Carranco y...

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