Cómoda en su nueva ‘casa'

CHICAGO.- Mónica Puig Marchán apretó el botón de reset el pasado mes de enero. En sus palabras, quería "salir del hoyo" en el cual había caído en los pasados años tras ganar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Río 2016. Los resultados no estaban llegando, así que acudió a Kamau Murray para que se convirtiera en su nuevo entrenador en sustitución del argentino Juan "Nacho" Todero.Pero el cambio fue mucho más profundo. A sus 25 años, empacó sus pertenencias y por primera vez en su vida se mudó fuera del estado de Florida, donde se crió con sus padres Astrid y José "Pepe" Puig y donde residía en los pocos meses del año en los que no está viajando el mundo compitiendo. Llegó a Chicago para entrenar a tiempo completo con Murray y, más importante aún, madurar."Estoy viviendo en otra ciudad a tres horas y media de mis padres, en avión. No pueden venir tan a menudo; yo antes podía bajar a Miami cada fin de semana (desde Boca Ratón, donde vivía). Pero esto me ha dado más responsabilidad de velar mis cosas, hacer mis horarios, cocinar, hacer compras… empezar a vivir ahora un poco más independiente", relató Puig a El Nuevo Día en reciente entrevista en el XS Tennis Village, donde entrena con Murray.En Chicago, según cuenta, pasa la mayoría del tiempo en las canchas y en el gimnasio. En su tiempo libre, gusta de caminar por la ciudad y pasar horas tomando té y leyendo en un café cerca de su apartamento. Dice que solo los puertorriqueños la reconocen en la calle, y que la primera pregunta que le hacen es "Mónica, ¿qué haces aquí?" El ajuste ha sido uno bueno, aunque reconoce que lo más difícil es tener a su familia lejos. "Crecí con unos padres que siempre me han querido, han hecho todo por mí, me han amado, y de repente yo irme de la casa, pues es un poco fuerte. Pero el enfoque que tengo ahora es que estoy haciendo todo este sacrificio para conseguir buenos resultados y para crecer como persona".Puig actualmente ocupa la posición 62 en el ranking mundial. Tras la medalla en Río, no ha podido ganar otro torneo. En todo el 2018, solo pudo alcanzar una semifinal. Su relación con Todero le había dejado una medalla de oro, pero optó por el cambio. Murray era coach de Sloane Stephens, campeona del Abierto de Estados Unidos en el 2017. Puig lo conoció cuando jugó dobles con Stephens el año pasado. "Me llena de mucho miedo todo lo que ha pasado desde Río. No ha sido fácil bregar con expectativas de otra gente, lo que dice la gente cuando pierdes. Eso...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR