abraza el MESTIZAJE
Por Marcos Billy Guzmán
Especial El Nuevo Día
Quienes así alcanzan a conectar con sus fibras emotivas y las de otros por medio del jazz rara vez lo hacen en solitario; la comunicación entre instrumentos engrana usualmente de forma tan espontánea como colectiva.
¿Qué es el jazz? ¿Qué es el jazz en Puerto Rico?
En la Isla, la definición ha apelado a la mezcla intensificándose -sobre todo en los últimos años- con el Puerto Rico Heineken JazzFest (PRHJF), que este mes celebra su edición 23. El evento, considerado el más importante del género en suelo boricua, ha marcado la tendencia integrando a talentos jóvenes que fusionan cada vez más estilos y ritmos.
¿A qué responde esa tendencia? ¿Peligran las raíces del jazz? ¿Se desvía su principio?
Previo a presentarse este año en la tarima del festival, un grupo de músicos veteranos y otros más noveles reflexionan sobre el asunto.
Luis Álvarez, quien produce el evento hace 20 años, admite que mantener el festival vigente es un "reto total", sobre todo porque "no estamos ante un género comercial".
Incorporar nuevas caras, menciona, tiene como fin extender su impacto. Con esto pretende "exponer a la gente a nuevos estilos" para despertar el interés del público más joven que apoyará el jazz durante las próximas décadas.
"Es importante que se conozca la riqueza y versatilidad del jazz para mantenerlo fresco y relevante. Queremos educar, que es lo primordial, pero también servir de plataforma para el talento local", comenta.
A su juicio, el deseo de explorar en el jazz ha aumentado.
"En Puerto Rico siempre prevaleció el latin jazz y recuerdo que con Betty Carter se levantaban de los asientos. Ahora ponemos ese estilo en el medio y dejamos lo latino al final para que la gente descubra. Hoy ha habido un desarrollo en el interés y la creatividad", indica y opina que ese cambio se debe en parte a que instituciones como el Conservatorio de Música han expandido su currículo a otros géneros que no solo son clásicos.
Como ejemplo de esta tendencia, Viento de Agua (fundado en Nueva York en 1997) se presenta por primera vez este año en el PRHJF. Su estilo no es usual en el evento y, por tal razón, los 13 músicos ven su participación como una puerta para que otros como ellos puedan expresar su talento en el jazz.
"Se están abriendo más a grupos que regularmente no tocarían allí. Somos primordialmente pleneros y tener la oportunidad de poner nuestra música autóctona en la tarima del festival es tremendo privilegio"...
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