Adolescentes en riesgo
Por Ileana Delgado
idelgado@elnuevodia.com
Por eso es tan importante, coinciden los profesionales de la salud, la detección temprana de una adicción. Es, de hecho, la clave para que se le pueda ofrecer al adolescente la oportunidad de aceptar ayuda y evitar que sea vea involucrado en una espiral de deterioro personal y familiar.
"La tarea más importante de la etapa de la adolescencia es que ellos definan su propia identidad, al tiempo que buscan autonomía. Es una etapa del desarrollo en la que van definiendo quiénes son. Y toma más importancia la opinión que tienen sus pares de ellos. Ahí es que está la vulnerabilidad", resalta la psiquiatra Arlene Martínez Nieto, directora de la Unidad de Adolescentes del First Hospital Panamericano, en Cidra.
Y como para ellos cobra tanta relevancia lo que opinan sus amigos, dice la psiquiatra, eso los hace presa fácil de la presión de grupo. Lo que los puede llevar a "un juego social", que a veces incluye el uso de sustancias.
"Desde el punto de vista del desarrollo, esa experimentación con drogas se está viendo cada vez más temprano. Ahora los chicos están mucho más expuestos y entran más temprano en esos procesos", advierte Martínez Nieto, tras enfatizar que esta situación se da en todos los niveles sociales y en los colegios más prominentes del País.
De hecho, la experimentación puede comenzar hasta en la propia casa, usando medicamentos que consiguen en el botiquín del hogar o con pastillas que se venden 'over the counter'. "Es parte de un juego pero puede llegar un momento en el que se hacen adictos", agrega.
Pero para lograr identificar posibles situaciones de uso de sustancias, es crucial que los padres estén muy atentos al comportamiento de sus hijos y actúen rápido, aconseja Mario Beltrán, consejero en adicciones y director de la Comisión Certificadora de Profesionales en Sustancias Psicoactivas.
"La adolescencia viene acompañada de muchos cambios, tanto físicos como emocionales. Es una época en que, generalmente, los jóvenes son impulsivos y están probándose ellos mismos, al tiempo que buscan la aceptación de sus familiares y de sus pares en la escuela", resalta Beltrán, quien también trabaja con la compañía FHC Health System de Puerto Rico, proveedores de servicios de salud mental.
Según Beltrán, uno de los problemas en Puerto Rico es que el tema de adicción es tabú en muchas familias. "Nadie quiere hablar, inclusive dentro del mismo núcleo familiar. Y a veces, por no hablar y reaccionar rápido, se pierde un tiempo crucial", sostiene...
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