Agónica racha

Por Rubén A. Rodríguez

rrodriguez1@elnuevodia.com

Quince días después y con trece reveses en catorce partidos, los Marlins lucen desorientados, abatidos y sumergidos peligrosamente en un abismo del cual al parecer no podrán salir tan fácilmente.

Y es que las lesiones han afectado grandemente a esta novena que hasta el 31 de mayo estaba luchando la primera posición con los Filis de Filadelfia con marca de 31-22.

Primero fue Josh Johnson, su principal lanzador abridor y luego el torpedero Hanley Ramírez, la figura más importante de la franquicia.

Con el revés del primer juego de la doble tanda ante los Filis ayer, Florida ha perdido cinco juegos en sucesión y ha caído a una cuarta posición con 32-35 superados incluso por los inconsistentes Mets de Nueva York.

"Esto ha sido un desastre. Ha sido bien frustrante esto que nos está pasando por el hecho de que habíamos venido jugando tan bien", dijo el dirigente puertorriqueño Edwin Rodríguez.

"Pero hay que ser realista. Lo que yo venía diciendo desde los campos de entrenamiento se está dando. El margen de error en este equipo es bien pequeño. Si se nos lesionaba uno de los jugadores claves sabíamos que este no sería el mismo equipo".

Y no fue uno, sino dos los elementos que se afectaron por lesiones. Para colmo fueron las principales figuras las que se vieron aquejados por dolencias.

Johnson, uno de los mejores lanzadores del béisbol, se lastimó su brazo de lanzar en mayo y no se espera que regrese hasta después del Juego de Estrellas y Ramírez, quien precisamente regresó a juego hace unos días, tenía lastimada la espalda.

"Tan pronto se lastimó Hanley, empezamos a perder. No es coincidencia. De ahí para acá ha sido un desastre. Esto se veía venir. Estamos hablando de dos jugadores que son la cara de la franquicia. Si ninguno de ellos está tendremos problemas", agregó el dirigente.

"Si tú le quitas a Utley (Chase) a Filadelfia todavía te quedan Howard (Ryan), Victorino. Nosotros no".

En esta miserable racha, los Marlins han perdido ocho juego por una carrera una señal inequívoca que sus bates no están produciendo de forma oportuna.

Un dato que demuestra este aspecto es la cantidad de carreras remolcadas que tuvo el equipo durante los primeros dos meses de temporada. Los Marlins...

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