Se agrava la salud fiscal de los municipios

Las maltrechas finanzas de los municipios han recibido un nuevo golpe a causa de la pandemia del COVID-19, con consecuencias que, aunque ya son palpables, sus efectos definitivos se sabrán el próximo año, advirtieron varios alcaldes populares y novoprogresistas."Esto es bien sencillo, los municipios hemos recibido dinero de ayudas federales y ayudas estatales, el problema es que eso (la ayuda) es una sola vez", dijo el alcalde de Maunabo, Jorge L. Márquez Pérez."El problema grande lo vas a poder palpar el año que viene y vas a ver un efecto bien grande. Las finanzas municipales van a tener un disloque bien grande y lo vamos a ver el año que viene", reiteró el también miembro de la Junta de Gobierno del Centro de Recaudación de Ingresos Municipales (CRIM).Márquez Pérez, al igual que otros ejecutivos entrevistados, se refirió a que, actualmente, los municipios han tenido un respiro debido a los fondos millonarios que recibieron de la "Ley federal de Ayuda, Alivio y Seguridad Económica por Coronavirus" (Cares Act) y del gobierno central para paliar los estragos del COVID-19.Márquez Pérez recordó, además, que las remesas del CRIM, que recibe cada ayuntamiento mensualmente, están calculadas a base de estimados de recaudos.No será hasta abril o mayo del próximo año que el CRIM ajuste esas remesas a tono con los recaudos municipales reales. "Ahí es que viene el golpe", anticipó Márquez Pérez.En julio pasado, 15 municipios ya habían experimentado una reducción en las remesas de entre 25% hasta poco más de 30% de los ingresos presupuestados, lo que se suma a la merma de $360 millones en fondos del gobierno estatal y la eliminación de la "Ley para la Reducción de las Cargas Administrativas de los Municipios" (Ley 29-2019).Ante las restricciones impuestas para controlar la propagación del coronavirus, los alcaldes ven a diario cómo baja la actividad comercial en sus respectivos pueblos y saben que eso tendrá repercusiones en las finanzas municipales."Son millonarias las pérdidas porque hemos visto cómo han estado radicando el IVU (impuesto sobre ventas y uso), ha bajado y lo hemos visto físicamente. (Hay) mucho negocio que ha estado cerrado o funcionando a un 50%", apuntó el alcalde de Cabo Rojo, Roberto "Bobby" Ramírez Kurtz.Destacó que los llamados chinchorros aportan económicamente a los municipios y, como no pueden abrir debido a la directriz de la gobernadora Wanda Vázquez Garced, cierran u optan por cambiar su permiso a uno de restaurante para...

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