Alerta, preparación y respuesta

600 PalabrasPara cuando el crucero Costa Luminosa atracaba en San Juan y desembarcaban las primeras personas contagiadas con el COVID-19, contoda posibilidad ya el virus se encontraba en Puerto Rico.Tan temprano como a mediados de febrero - un mes antes de detectarse el primer caso del virus en Puerto Rico- viajeros provenientes de Nueva York, Boston, New Jersey y Connecticut, ya fuesen turistas o familiares nuestros, posiblemente traían consigo un huésped desconocido que se alojó libremente por todo lo largo y lo ancho de la isla, con pacientes en Mayagüez, Ponce y la zona metropolitana en pocos días.Recientemente, investigadores epidemiológicos de varias universidades de Estados Unidos demostraron, en modelos basados en el tráfico de personas y la tasa de infección, cómo varias semanas antes de detectar los primeros casos en la ciudad de Nueva York, el virus ya se encontraba regado por la ciudad y áreas vecinas.Para cuando el 3 de enero, la Casa Blanca recibe la primera llamada de su personal en China, ya el virus posiblemente estaba asentándose en el país. La primera alerta no vino de Miami, ni de Nueva York, sino de un pueblo en el estado de Washington, en el oeste del país.Dos lecciones importantes para Puerto Rico en esta etapa temprana: tenemos que montar un sistema de vigilancia y rastreo robusto. Segundo: asumir que un virus ya ha llegado a nuestra zona cuando aparezcan las primeras señales, sea en África, Europa o Asia.Los virus respiratorios serán impredecibles, pero llegarán a Puerto Rico. Contrario a los huracanes que tienen una ruta y una temporada previsible (por el momento), los virus respiratorios aparecerán en lugares desconocidos y remotos para nosotros. Ello no quita que, al igual que en la temporada de huracanes, debemos tener un sistema de alerta.No podemos subestimar la experiencia que hemos adquirido con la preparación contra terremotos y huracanes. Y no es para crear más pánico y ansiedad, todo lo contrario. Saber cuáles son los pasos en la alerta amarilla, anaranjada y roja ayudará a prepararnos mejor.Y si el gobierno no puede, no quiere o no sabe: usted sí. Hemos aprendido ya en estas últimas semanas. Prepare a su familia y a su comunidad, igual...

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