Apetito empresarial que no conoce límites

Por Marian Díaz

mdiaz1@elnuevodia.com

La semana que recién culminó fue intensa para Puerto Rico. Por un lado, el Gobierno aprobó el traspaso por los próximos 40 años del aeropuerto internacional Luis Muñoz Marín al consorcio mexicoestadounidense Aerostar Airport Holdings y, por el otro, anunció recortes en los beneficios del sistema de pensiones gubernamental con la promesa de sacar de la crisis, de una vez por todas, al Sistema de Retiro de los empleados del Estado Libre Asociado.

Si bien los ajustes que realiza el Gobierno para lidiar con la crisis fiscal y económica causan incertidumbre en el clima de negocios, hay empresarios, que pese a los retos, no se quitan. Entre ellos: Jaime Fonalledas.

Mientras Puerto Rico recibía un mar de noticias de impacto en materia fiscal, económica y social, Fonalledas no se desviaba de su plan y trabajaba inmerso en los nuevos proyectos que desarrollará en el centro comercial Plaza Las Américas.

En entrevista exclusiva con Negocios, el presidente de Empresas Fonalledas reveló detalles de las próximas adiciones y remodelaciones que le hará al llamado "centro de todo".

Para esta próxima movida, el empresario recién adquirió las 11 cuerdas donde está la armería de la Guardia Nacional en la avenida Roosevelt, contiguo a Plaza Las Américas.

Hacía más de 40 años que Fonalledas estaba detrás de esos terrenos, los que una vez pertenecieron a su familia, pero que el Gobierno había expropiado.

Contó que tan lejano como en 1972 visitó al General Carlos Chardón, jefe en aquel entonces de la Guardia Nacional en la Isla, para que le vendiera dichas tierras, pero no tuvo éxito. A lo largo de los años, lo intentó varias veces, hasta que por fin lo consiguió.

Según él, desde muy pequeño aprendió, a través de la lectura de cuentos que la persistencia es un "gran talento".

El uso que le dará a las 11 cuerdas lo tiene ya definido, y no vaciló en responder que visualiza un hotel en esa zona de Hato Rey.

"Sky is the limit, aunque hay que atemperarlo a la realidad del país. Yo he pensado en un hotel, comercios y oficinas. Lo que hace sentido es un desarrollo comercial de usos mixtos", fue la respuesta inmediata.

Estima que en ese terreno cabrían unos 300,000 pies cuadrados de espacio comercial. Eso sin contar otras siete cuerdas de terreno que hay detrás de la Guardia Nacional -donde antes había un negocio de pájaros-, que pertenecen también a su familia y que por ahora es un área baldía.

Tan entusiasmado está con el proyecto...

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