Azote legal de Britto

Por Rebecca Banuchi

rebecca.banuchi@elnuevodia.com

Con una lista preliminar de 177 comercios demandados, el pleito incoado por Britto junto a la compañía propietaria de todos sus derechos y la empresa autorizada a reproducir su trabajo es uno de los más grandes por violación a las leyes de propiedad intelectual presentado en tiempos recientes.

Los negocios supuestamente implicados en el esquema de reproducción y venta del material falsificado están localizados a lo largo y ancho de la Isla, y aunque la mayoría son pequeños negocios, la lista incluye pulgueros, cadenas de tiendas al detal y distribuidoras de la mercancía.

Aunque en Puerto Rico se desconoce la magnitud de este problema, datos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) indican que en Estados Unidos la falsificación y la piratería tienen un impacto económico de unos $ 250,000 millones anuales.

"En los últimos años, la falsificación, la piratería y otras violaciones de derechos de propiedad intelectual han crecido en magnitud y complejidad costándole a empresas miles de millones de dólares en ingresos perdidos y también planteando a menudo problemas de seguridad y riesgos a la salud de millones de consumidores", señaló Iván Ortiz, portavoz de la agencia federal.

La demanda de 43 páginas fue presentada el 31 de agosto, y ese mismo día el juez federal Gustavo Gelpí emitió una orden de entredicho provisional para prohibir, entre otras cosas, la reproducción, distribución, venta y promoción de la mercancía pirateada.

A raíz de esa orden, agentes del Cuerpo de Alguaciles federales realizaron un operativo el 3 de septiembre en el que incautaron miles de piezas en unos 30 establecimientos.

El total del material confiscado, que se encuentra custodiado en un depósito, se desconoce con certeza, pero Dora Peñagarícano, abogada de los demandantes, indicó que la cifra ronda las 21,000 unidades, aunque podría ser mayor.

La letrada del bufete McConnell Valdés dijo que debido al gran número de demandados y lo distantes que ubican algunos de ellos no se podía emitir una orden de incautación que los abarcara a todos.

Sin embargo, destacó que durante una investigación que realizaron por dos semanas previo a la radicación de la demanda se adquirieron productos en cada uno de los comercios incluidos en el pleito, y cuentan con los recibos de compra como evidencia.

La lista de los demandados también podría aumentar pronto, pues los investigadores contratados todavía permanecen...

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