Las bondades de Melquiades

Por luis R. Trelles

Especial El Nuevo Día

Usando la sensibilidad artística que le ha valido reconocimientos en la Isla y en el exterior, Rosario-Sastre también exhibe otra faceta: la de mentor de jóvenes desaventajados.

Con la idea de ayudar a esta población en riesgo inició la Fundación "La Línea de mi Pensamiento", que ofrece talleres de dibujo, charlas de motivación y que también otorga becas para el desarrollo artístico.

"No hay ninguna dicotomía entre tener éxito artístico y ser bondadoso", mencionó Rosario-Sastre.

En reconocimiento de esa labor benéfica, y también por el valor de su propia obra, la embajada estadounidense en Honduras recientemente lo invitó a la capital de ese país centroamericano, Tegucigalpa, donde se encuentra como Enviado Cultural.

La Fundación "La Línea de mi Pensamiento", una organización sin fines de lucro, surgió hace tres años con la misión de impactar a comunidades de niños con algún tipo de condición especial.

Mediante el uso de juguetes como carros de carrera, que son modificados por Rosario-Sastre para que sirvan de instrumentos de dibujo, el artista ayuda a desarrollar el ojo, las manos y las sensibilidad de sus pequeños discípulos.

"Las máquinas que yo preparo para hacer dibujos tienen control remoto, para trabajar con los niños", explicó Rosario-Sastre. "Encuentro que las marcas, trazos y huellas que dejan son importantes", añadió.

La fundación se nutre de donaciones de instituciones privadas. Estas facilitan las becas que otorga la institución para el desarrollo artístico de jóvenes talentosos y de escasos recursos.

"Tú escoges el artista que tú quieres ser", expresó el escultor.

"Yo he seleccionado...

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