Borrachos y política

PERIODISTA

El tema obligado de los más borrachos, evidentemente, era la política, y como periodista se supone que yo comentara cuantas ocurrencias surgían en la ebria tertulia. Lo más claro para los borrachos allí era la fácil victoria electoral que tendrá Alejandro García Padilla en las elecciones generales en noviembre próximo.

En esa votación, según los más borrachos, se apoyará con un rotundo "sí" la feliz y contenta relación política que tenemos con Estados Unidos de América desde hace sesenta años, basada en "lo mejor de los dos mundos" y en que no tocaremos ese asunto hasta que mejoren significativamente los indicadores económicos del país.

Como bien señalan los estudiosos de ese proceso, en esa votación de 1952 -donde participó el 58 por ciento de los electores inscritos- el máximo líder político del país, Luis Muñoz Marín, aseguró que la aprobación de esa Constitución sería la fórmula que pondría a la Isla en el camino del progreso, la libertad, la justicia, el amor y el conocimiento. Además que desde ese momento se haría la luz y evitaríamos para siempre que los bárbaros llegaran al poder.

La Constitución se aprobó, pero en Washington le quitaron cosas importantes que no les gustaron. Nada de eso se informó a los votantes que la habían aprobado.

Los...

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