Un brazo confiable

Por El Nuevo Día

El lanzador derecho de los Leones de Ponce se ha convertido en uno de los principales brazos nativos de los últimos años, y su presencia es requerida en todas las ligas, desde la Doble A a la invernal. Y sus números no fallan.

Sin incluir la acción del martes, Padilla lideraba el circuito entre los lanzadores con marca de 4-0, y su promedio de carreras limpias permitidas por juego era de 0.82. Había participado en seis de los 12 partidos de su novena en lo que va de torneo.

"Yo lo que hago es que trabajo fuerte, porque eso es lo único que uno puede controlar. Tratar de hacer lo mejor posible", dijo Padilla, de 34 años.

"Los muchachos en el equipo me relajan porque yo tiro 82 y 85 millas por hora y saco los outs. No saben cómo lo hago. Pero lo que hay que hacer es mover la bola, tirar todos los pitcheos en todos los conteos y tener una buena localización".

Suena muy fácil, pero no lo es, especialmente si en menos de un año calendario el lanzador tiene que pasar de Mayagüez (Doble A), a Bridgeport (Liga Independiente del Atlántico), a Yucatán (liga mexicana de verano), a Cuba (fogueo del Equipo Nacional), a Panamá (Copa Mundial), a...

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