Buyeculando

Miguel Rodríguez Casellas

El próximo mes de agosto el país amanecerá con una nueva cerveza en las góndolas. "Buyé' Est Nomen Ejvs", un nombre que debía evocar la "agresividad" y el "sosiego" de los puertorriqueños, porque la patria se imagina en perfecto equilibrio, aunque la riqueza responda a otro universo físico, uno donde la gravedad actúa selectivamente.

Es imposible evitar ironizar el delirio ponceño que ha sobrevivido dos fines de siglo. Buyé es Ponce, que aún se cree manantial de la patria y de todo lo noble que ha dado la Isla en terreno público y privado. ¿Habrá algo más fundacional que un manantial? Pues resulta que el terreno que le alquilaron al Gobierno estos nuevos cerveceros del sur tiene dos: se unen aquí la ventaja material y simbólica en una misma ubicación.

Buyé no es cara, pero es selectiva. Según sus promotores, sólo aquellos que quieran transformar el País deben beberla. El resto que siga en Medalla.

El conglomerado buyelense de estadistas, melonistas, soberanistas y busconistas es un retablo de armonía entre capitales criollos bien criados. Asumo que satirizar ese junte es la parte más delicada, pues de un tiempo para acá la missuniversalización del discurso...

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