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Recientemente, una señora escribió a esta sección de El Nuevo Día muy molesta con los bonistas.

Ella entiende que hay otros asuntos más importantes que atender en el país y otras personas a quienes pagarles, antes que a los bonistas.

Me percaté, por su artículo, que ella no entiende bien lo que es ser un “bonista” y cuál es el rol que el bonista ha jugado por los pasados años en el desarrollo de nuestra isla.

Creo que si a alguien hay que pagarles con prioridad es a los bonistas, ya que fueron ellos los que invirtieron de buena fe sus dineros, ahorros, etc., en el país, devengado unos intereses atrevés de muchos años para que ese dinero que ellos “prestaron” al pueblo de Puerto Rico lo invirtiera el gobierno en obras para echar adelante al país.

Ese dinero de los bonistas fue la base de la economía puertorriqueña por muchos años. Los bonistas no son los “riquitos" del país: son personas que en vez de guardar su dinero en bancos, los invirtieron en bonos del país.

Esa inversión era a largo...

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