Cal y arena

Por Carlos Rosa Rosa

crosa@elnuevodia.com

Dos sentimientos diferentes: uno por la situación de enfermedad de Díaz; y otro por la llegada al plantel de una pieza tan valiosa como Rodríguez.

Primeramente, el gerente general de los Capitanes de Arecibo no sabe cómo explicar las múltiples condiciones de salud que han afectado a Díaz en los últimos años. Y esta temporada no es la excepción.

Díaz ya ha tenido que batallar con dos condiciones, obligándolo a ausentarse a 19 de los 25 partidos de los Capitanes. Una lesión en una rodilla en un juego de pretemporada en Quebradillas lo sacó de los primeros 16 encuentros del torneo.

"Lo había visto en la mejor condición. En la Liga de las Américas, había jugado extraordinariamente bien en Ecuador. Se veía sólido. Entonces ocurre lo de la lesión y lo saca de carrera", dijo el directivo arecibeño.

Díaz se recuperó y retornó al tabloncillo el pasado 10 de mayo para enfrentar a Mayagüez. Eran buenas noticias para él y los Capitanes. Jugó seis partidos consecutivos hasta que otra condición lo detuvo.

Un fuerte dolor abdominal lo guió al hospital el pasado jueves. Y allí continuaba recluido hasta ayer, precisó García.

"Además del dolor, llegó deshidratado y unido a un virus provocó una situación bastante seria. Gracias a Dios ya ha ido mejorando. Poco a poco ha ido respondiendo a los tratamientos", indicó García sin precisar una fecha para su salida del hospital.

Incluyendo el partido de anoche, Díaz ha perdido los últimos tres desafíos de los Capitanes, quienes buscaban extender su racha ganadora a siete victorias...

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