La otra cara del temporal

Gracias María, por apagar el interruptor de nuestra agitada materialista e inconsciente vida.

Gracias, María, por este paréntesis existencial que llamamos vida.

Gracias, María, por enfrentarnos al espejo con esta realidad y a este nuevo Puerto Rico.

Gracias María, por darnos la oportunidad de demostrar de qué estamos hechos los puertorriqueños. Estamos hechos de luz para irradiar a nuestra isla, a nuestros semejantes y al mundo entero.

Gracias María, por este tiempo que no transcurre, de horas lentas, donde estamos a solas Dios, la inmensidad y yo.

Gracias María, por ofrecernos este regalo de conversar con Dios a cada instante para encontrar la fortaleza de levantar de nuevo nuestro vuelo.

Gracias María, por desempolvar la esencia del jíbaro de antaño. Noble, honrado, trabajador, solidario, justo y humanitario.

Gracias María, por permitirme ver el rostro de Dios en cada hermano que encuentro a mi paso.

Gracias María, por volver a pronunciar la palabra "Te amo" más a menudo y a abrazar con más fuerza.

Gracias María, por recordarme que la vida es un...

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