Causa para juicio por fraude en Guaynabo

Por Nydia Bauzá

nydia.bauza@gfrmedia.com

Pero la magistrada desestimó dos cargos en los que se imputaba al acusado perjurio y falsedad ideológica.

El fiscal Edmanuel Santiago Quiles sostuvo en un turno de cierre que María Vargas Huertas, dueña de la residencia cuya dirección el acusado supuestamente utilizó en la transferencia electoral, declaró en la vista preliminar que hace más de 50 años que vive en su casa en la urbanización Luis Muñoz Rivera y que no conoce a Viera Suárez.

"Las circunstancias que se dan aquí no son las que se dan todos los días. Lo que pasa es que el imputado se vale de eso y le miente a la Junta de Inscripción Permanente", dijo el fiscal, quien lleva el caso en unión a la fiscal Lorraine Pietri Colón, de la División de Integridad Pública, del Departamento de Justicia.

El abogado Eduardo Otero, quien representó al acusado junto los licenciados Ana Quintero y Alexis Acevedo, argumentó que la prueba tenía "una gama de inconsistencias" y que no había evidencia directa ni circunstancial del acto imputado a su cliente.

"No se ha pasado prueba de que se le tomó juramento, un elemento del perjurio. No ha habido ningún nexo causal", dijo Otero. Sobre la identificación del acusado, dijo que la fiscalía tenía "medios accesibles" que no usó como "hacer un line up (rueda de confrontación) o una prueba de caligrafía".

Pero, en este caso, los fiscales cambiaron su estrategia de identificar a los imputados y Viera Suárez fue señalado en corte abierta por la testigo, Carmen Rondón, quien laboraba en la Junta de Inscripción Permanente de...

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