El cielo es el límite

Por Jorge L. Pérez

jperez@elnuevodia.com

Curiosamente, en mucho.

En el béisbol, donde ya tres puertorriqueños -Roberto Clemente, Orlando 'Peruchín' Cepeda y Roberto Alomar han sido exaltados como inmortales, existen varios requisitos básicos para que un ex pelotero sea elegible para ser incluido en el llamado Pabellón de los Inmortales.

Entre ellos: el jugador debe haberse retirado. Más aún, debe llevar cinco años completos en el retiro antes de ser elegible para entrar al proceso de votación.

La Iglesia Católica tiene un reglamento parecido: deben haber pasado cinco años de la muerte del candidato antes de que pueda decretarse el inicio del proceso que, en los casos más especiales, puede culminar en la santidad.

La razón básicamente es la misma en ambos casos: se ordena un lapso obligatorio que permite que se enfríe un poco el calor del momento y da pie a que se analicen a fondo las cualidades de los posibles elegidos antes de tomar una decisión definitiva.

Claro está, también hay excepciones: a raíz de la trágica muerte de Roberto Clemente el 31 de diciembre de 1972, el béisbol obvió la espera de cinco años, al reconocer tanto de la indiscutible grandeza del astro boricua como pelotero como el hecho de que perdió la vida en un gesto heroico al accidentarse el avión en el que llevaba pertrechos de urgencia a Nicaragua después de un terremoto en ese país.

Así, permitió que fuera exaltado al año siguiente.

Y, en la Iglesia, tanto la madre Teresa de Calcuta como el papa Juan Pablo II han recibido en tiempos recientes el visto bueno para que su proceso de canonización comience antes de expirado el plazo de cinco años después de su muerte.

En ambos casos, la Iglesia afirma que reaccionó ante un clamor generalizado, y, al explicar el pasado 11 de enero que el papa Juan Pablo II será beatificado el 1 de mayo, un comunicado emitido por el Vaticano explicó:

"La causa de beatificación de Juan Pablo II por Dispensa Pontificia empezó antes de que transcurrieran los cinco años de la muerte del Siervo de Dios, requeridos por la normativa vigente", agregando que "ese procedimiento fue solicitado por la imponente fama de santidad" de Juan Pablo II "en vida, en muerte y luego de la muerte".

La prensa en general ha bautizado este proceso como "la canonización exprés" de Juan Pablo II.

Se tiene entendido que la Iglesia Católica cuenta con más de 3,000 santos. Muchos de ellos, sin embargo, fueron canonizados en los primeros siglos de la iglesia, cuando no se...

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