Colapsa el sistema

Por Gerardo E. Alvarado León

galvarado@elnuevodia.com

Para colmo de males, el generador eléctrico que alimentaba el condominio Bel-Air, donde reside, se rompió tres horas después. "Estamos sin elevador y sin agua potable porque necesitamos la luz para que el sistema de bombeo funcione", dijo Lizardi mientras supervisaba la reparación del generador.

No muy lejos de su casa, en Chalets de San Patricio, José Antonio González, de 42 años, contaba una historia similar. Estaba sin luz desde la madrugada de ayer.

"Llamamos a la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y nos dijeron que están trabajando en eso. Hemos visto camiones pasar, pero aún no tenemos luz", sostuvo.

El director ejecutivo de la AEE, Miguel Cordero, detalló que, en total, 950,000 de los 1.5 millones de sus abonados se quedaron sin luz debido al paso de Irene. Eso es el 63% del total de clientes.

Los vientos sostenidos de 75 millas por hora (mph) y ráfagas aún más fuertes del ciclón tumbaron ramas de árboles y cables del tendido eléctrico, poniendo en evidencia -por segunda vez en el mes- la vulnerabilidad del sistema de la AEE.

En opinión del ingeniero electricista Agustín Irizarry, catedrático de la Universidad de Puerto Rico en Mayagüez, el sistema de la AEE debería estar preparado para enfrentar disturbios atmosféricos, si se considera que el País vive en temporada de huracanes durante seis meses del año.

A principios de mes, el paso de la tormenta Emily dejó a oscuras a 18,500 abonados de la AEE. Entonces, el propio Cordero admitió que una fuerte ráfaga de viento en las Islas Vírgenes americanas fue lo que ocasionó las primeras fallas del sistema.

En esta ocasión, el panorama lució sombrío para la AEE desde el domingo, cuando se formó Irene. Ese día, dos hombres murieron electrocutados mientras intentaban robar cobre en el muelle 15 de San Juan. El incidente dejó sin luz a unos 4,000 abonados.

"La AEE sabe cuál es la situación y no le interesa corregirla: no hay mantenimiento preventivo, no hay desganche continuo y el sistema de distribución está abandonado", mencionó Irizarry.

Recordó que en septiembre del 2004, ante el paso de la tormenta Jeanne (que luego se convirtió en huracán), la AEE dejó sin servicio a todos sus clientes al apagar su sistema antes de que el ciclón llegara. "Colapsó el sistema. La AEE demostró que no estaba preparada para una tormenta y mucho menos para un huracán", dijo. En el caso del huracán Georges, que tenía vientos de 115 mph, el 99% de los...

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