Combustible que transforma
Por Lilliam Irizarry
lilliam.irizarry@gfrmedia.com
Y es que las palabras de Arturo Massol, de Casa Pueblo; Vicki Rossi, de Juan Domingo en Acción; Mario Núñez, del Grupo de las Ocho Comunidades del Caño Martín Peña (G-8); Evaristo Ujaque, del Comité Comunal de Corcovada, y Lourdes Miranda, de la Miranda Foundation, evidencian que en sus pechos y sus acciones late un mismo corazón.
El quinteto conversó recientemente con El Nuevo Día sobre el "Premio a la Solidaridad. Honrando lo que nos une", con el cual la Miranda Foundation reconoce desde hace once años a organizaciones sin fines de lucro y movimientos de acción ciudadana que promueven la solidaridad colectiva, tejen redes comunitarias y tienden puentes intersectoriales por el bienestar de Puerto Rico.
¿Por qué premiar la solidaridad?, es la pregunta obligada.
"Porque la solidaridad es un valor fundamental, es la zapata para todo lo que pueda ser un ser humano y un país. Porque la solidaridad es el fundamento de todo lo que puede pasar en las relaciones humanas", expresa Miranda, para quien las entidades sin fines de lucro y los movimientos ciudadanos en la Isla han establecido una diferencia que debe ser reconocida y replicada para lograr una verdadera transformación colectiva.
Este año, la entidad que resulte ganadora del premio recibirá $10,000 en efectivo. Además, se seleccionarán dos menciones honoríficas que obtendrán $2,500 cada una y la organización reconocida con el Premio Santander en Educación recibirá $5,000. La fecha límite para someter nominaciones es el 30 de junio.
Para Massol, cuya organización Casa Pueblo en Adjuntas recibió el galardón en 2012 por llevar la voz cantante en la lucha contra el gasoducto del norte, el Premio a la Solidaridad ha venido a reconocer y fortalecer la existencia de un gobierno alterno encabezado por el pueblo.
"Porque todo lo que estamos haciendo nosotros es una gobernanza. Nosotros estamos desarrollando respuestas políticas, de educación, de desarrollo económico, contra la violencia. Son respuestas de responsabilidades que normalmente le toca al gobierno, pero el gobierno no puede, no tiene todos los recursos. Entonces hay una especie de gobierno alterno, paralelo, que por mucho tiempo ha sido subestimado o poco valorado", sostiene.
Núñez, en tanto, destaca que entre las fortalezas de las organizaciones de base comunitaria figura el que trabajan principalmente con voluntarios, lo que se traduce en mayor compromiso y amor al servicio que...
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