Comprometida con la ciencia para la gente

De un colegio católico dirigido por monjas, pasó a una escuela pública especializada en artes y, de ahí, a la universidad con miras a convertirse en médica.Pero dos experiencias en laboratorios de plantas y suelos, faltándole apenas un año para culminar el bachillerato, le cambiaron "la perspectiva". Sustituyó la anatomía humana por la ecología y biología de suelos, y completó una maestría y un doctorado en ambos campos. Luego, hizo un posdoctorado para investigar las dinámicas en el ecosistema ártico.Por disímiles que parezcan, estas experiencias se fusionan a la perfección en Grizelle González, la nueva directora del Instituto Internacional de Dasonomía Tropical del Servicio Forestal federal.González -quien se describe como una lectora voraz de "historias sobre mujeres pioneras"- asumió el puesto el 14 de marzo, y se convirtió en la primera mujer a la cabeza de la dependencia, que tiene como labor principal generar y divulgar la mejor ciencia posible para el entendimiento y manejo sostenible de los bosques tropicales.En entrevista con El Nuevo Día, afirmó que, en su paso por las artes y la ciencia, ha adquirido herramientas que, "definitivamente", empleará como jefa del Instituto, entre las que mencionó pensamiento crítico, hablar en público, "aguantar" la retroalimentación (feedback) constructiva y "cuestionar ‘por qué’ sin confrontación"."Lo otro que puedo conectar es el comienzo humilde de mi familia en los campos de Arecibo y Lares, de donde son mis papás. Somos una familia grande y, en las reuniones de verano y navidades, éramos como 100 personas. Pero lo que era consistente es que yo siempre era la única nena que salía con mi abuelo, mi papá y mis tíos a recoger chinas o aguacates y, cuando me decían que había que excavar la tierra, me fascinaba. Me transporto a esos tiempos y, claramente, veo la conexión con lo que hago ahora", dijo González, nacida en San Juan, pero criada en Carolina.Desde su fundación, el Instituto había sido dirigido por hombres: Frank Wadsworth, precursor del estudio y conservación de bosques en Puerto Rico y quien ocupó el cargo por 26 años; y Ariel Lugo, científico emérito del Servicio Forestal federal y quien estuvo 42 años en el puesto."Mi compromiso es tal y como lo tuvieron ellos: llevar la ciencia a las manos de la sociedad puertorriqueña. Es mi interés que la ciencia sea voz y parte de la conservación y manejo de los bosques en Puerto Rico, pero que no se vea de manera aislada, sino integral, donde...

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