Conocedor de la fisonomía femenina

Por Liz Sandra Santiago

lsrivera@elnuevodia.com

"El estilo es lo más importante porque la moda viene y va pero el estilo permanece", comenta.

Este amor por el color y por sacar de cualquier rostro su lado más hermoso es una de las cualidades que le ha permitido vivir de la moda por los últimos 20 años.

"Han sido dos décadas de alegría, pero es un trabajo muy arduo porque el campo es muy competitivo en Nueva York, en París y en Milán", menciona sobre los lugares en los que ha laborado a lo largo de su carrera.

De carácter alegre y jovial, este artista del maquillaje señala que sobre sus conocimientos del tema impera el respeto al estilo particular de cada mujer. Por eso, jamás se atrevería a decir que una mujer es fea. Más bien, reconoce que hay rostros diferentes y asimétricos, que con un maquillaje adecuado pueden lucir hermosos.

"Maquillarse es un juego por lo que la mujer no debe tenerle miedo. La verdad es que si enfrentamos quienes somos sin maquillaje y nos aceptamos, no debe existir temor", dice.

El maquillista destaca que en la vida es importante mantener el sentido del humor y el estilo. Ese acercamiento que se hace a diario hacia la moda debe además estar lleno de alegría y creatividad.

"No podemos abordar la moda como un modo de pretensión. Debe ser un proceso que goces y que sea divertido. Las personas que me conocen saben que siempre ando con el lacito, que me gusta verme 'dandy' y así debe hacer la mujer. Debe gozarse el proceso de ponerse un maquillaje lindo y vestirse bien porque se trata de embellecer el espacio donde estás", comenta.

Uno de sus eventos favoritos es el desfile de moda porque considera que el trabajo que se realiza tras bastidores representa un proceso creativo muy grande.

"Tienes que ajustar tu obra a la visión del diseñador y que cuando la modelo salga todo se complemente. La mayor satisfacción es cuando percibo al final del 'show' que el diseñador está contento, porque en un desfile mi trabajo es poder interpretar el sueño de ese diseñador y ejecutarlo como quiere", comenta.

A pesar de que disfruta cada visita a la Isla, Karlo no tiene planes de regresar pues las oportunidades están en el extranjero.

"Nueva York, París y Milán me ofrecen algo que, desafortunadamente, en Puerto Rico no encuentro y son las oportunidades de empleo, de crear, de trabajar con diseñadores que nos limita el 100 por 35. Me fascinaría que la Isla...

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