'De contar con prueba... vamos a procesar'
Por Limarys Suárez Torres
lsuarez1@elnuevodia.com
A días de que El Nuevo Día revelara que en la Diócesis de Arecibo seis sacerdotes han sido expulsados por imputaciones de índole sexual desde el 2011 al presente, ayer el secretario del Departamento de Justicia, César Miranda, y el fiscal de distrito José Capó ordenaron que se investigue qué ocurrió con esos casos, aunque hoy día las víctimas sean adultos.
"Recibí instrucciones del secretario y de Capó de que trabaje mano a mano con la Policía para investigar la información que trascendió en El Nuevo Día de alegaciones de menores de edad que presuntamente fueron objeto de delitos sexuales por parte de sacerdotes", dijo Wilson González Antongiorgi, fiscal de distrito de Arecibo.
El jefe de los fiscales en Arecibo señaló que ayer su oficina emitió varios subpoenas y citaciones a varias autoridades eclesiásticas, entre ellos al obispo de Arecibo, Fernández Torres, y al obispo Luis Colón Rivera.
"Necesitamos todo documento sobre las investigaciones que las autoridades eclesiásticas llevaron a cabo con el propósito de identificar a las alegadas víctimas y los alegados perpetradores de estos actos. Necesitamos cualquier documento relacionado a los procesos eclesiásticos. Queremos determinar si hay la comisión de los delitos, si están prescritos, si hay personas adicionales envueltas y esclarecer estos casos", subrayó.
Al trascender que Justicia investigará los casos de abuso sexual de menores por sacerdotes, el obispo de Arecibo anunció que compartirá con las autoridades los datos sobre los religiosos expulsados por conducta impropia.
"Nuestro protocolo dispone que de tratarse de un menor de edad hay que instruir a los padres sobre la obligación en ley de denunciar la conducta ante las autoridades civiles, independientemente del proceso eclesiástico. Si los padres no lo hacen, nosotros tenemos la obligación de denunciarlo. No obstante, cuando se trata de un adulto y éste pide confidencialidad no podemos revelar su identidad ni referir el asunto a las autoridades civiles en contra de la voluntad de la víctima", aclaró Fernández Torres.
Por su parte, el fiscal de distrito de Arecibo destacó que los términos de prescripción de una agresión sexual a un menor varían dependiendo en la fecha en que ocurrió el acto y el Código Penal vigente al momento.
González Antongiorgi dijo, por ejemplo, que una agresión sexual a un menor puede prescribir cinco años después que la víctima cumplió 18 años, en otros...
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