Una 'cosa de muchachos' que terminó en tragedia

Por Sandra Caquías Cruz

scaquias@elnuevodia.com

Hasta ahí, más o menos. Después, fue que la cosa se complicó. En medio de la fiesta, uno de los asistentes, por razones que todavía se desconocen, saca un arma y le mete un tiro en el pecho al "disc jockey", matándolo prácticamente en el acto.

Así fueron descritos por el sargento David Correa Zayas los hechos que desembocaron en la muerte de Jean Carlos Alvarado Martínez, de 18 años, quien cayó abatido en medio de la sala de la residencia de Nicolás Isenberg y sus padres en la exclusiva urbanización Sabanera en Cidra ayer en la madrugada.

Los investigadores de la División de Homicidios de Caguas mantenían anoche a dos jóvenes detenidos por ser personas de interés en el crimen.

El agente Jesús Torres, de Homicidios de Caguas, indicó que esperaba por la fiscal Yaritza Carrasquillo para que determinara si sometía anoche u hoy sábado una acusación contra ambos detenidos, cuyas edades oscilan en los 17 y 18 años.

Según Correa Zayas, testigos dijeron que el asesino era uno de solo dos personas a los que el resto de los asistentes a la fiesta no conocía, los cuales llegaron acompañados de una joven que sí había sido invitada. En la fiesta había cerca de 30 jóvenes.

No se sabe exactamente qué desató la balacera, pero hay dos versiones.

Una apunta a que el atacante disparó al pecho de Alvarado Martínez sin mediar palabras. La otra dice que hubo una discusión. Según el sargento, uno de los testigos dijo que el atacante salió de la residencia pistola en mano y expresando: "échense pa' un lado".

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