La cultura que “oxigena” el país
Cuando el huracán María tocó tierra en Puerto Rico aquel 20 de septiembre de 2017, la tristeza y la desesperanza se convirtieron en un sentimiento compartido. Los poderosos vientos y las incesantes lluvias desvistieron el país, dejando visible toda su pobreza.
Entre el “shock” de descubrir el más hostil de los paisajes y las lágrimas de las pérdidas, fueron miles los que se encontraron en la más temida oscuridad, paralizados, tratando de entender una nueva geografía. En medio de la emergencia, de aquel desastre, decenas de artistas salieron a la calle desprendidamente para ayudar a trazar una nueva ruta, para volver a hacernos país.
A ellos nadie los tuvo que llamar ni reclamarle ayuda, sencillamente salieron a dar, a darse. Gracias a esos creadores y creadoras se desahogaron penas y compartieron vivencias a son de plena, se conversó y pensó a través del teatro en la naturaleza que sana, se crearon rumbones que ayudaron a soltar la tristeza y se llevaron a cabo talleres para apalabrar tanto dolor.
A esos artistas se unieron diversas instituciones culturales, como el Museo de Arte Contemporáneo y el Conservatorio de Música de Puerto Rico, por solo mencionar algunas, que abrieron sus puertas para servir de espacio de encuentro.
Todas esas iniciativas, entre muchas otras, han sido fundamentales en la recuperación del país que, a seis meses del huracán María, todavía enfrenta grandes desafíos. Estos agentes e instituciones culturales son parte vital de la ecuación para la reconstrucción de Puerto Rico, ya que no solo contribuyen en el mejoramiento de la salud emocional del pueblo, sino que también ofrecen nuevas miradas y soluciones creativas a los problemas que se enfrentan.
En una mesa redonda, celebrada por este medio la semana pasada, diversas figuras del quehacer cultural del país reflexionaron sobre el rol que juegan las artes y las entidades dedicadas a promoverlas en este nuevo escenario.
nuevo paradigma
Si algo han demostrado los pasados seis meses es que Puerto Rico vive otra realidad. En este país poshuracán, donde se ha exacerbado la pobreza, la desigualdad y la falta de acceso, los agentes e instituciones culturales podrían “oxigenar esas carencias”.
Así opinó el doctor César Rey, director ejecutivo de la Fundación Puertorriqueña de las Humanidades, quien entiende que la cultura al ser ese espacio común que comparten los puertorriqueños y puertorriqueñas, crea lazos de solidaridad que son vitales en la reconstrucción del país...
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