Le dan el último adiós a Clubman

Por Marie Custodio Collazo

mcustodio@elnuevodia.com

"Fui de los primeros clientes cuando Clubman abrió y ahora vengo a cerrarla", lamentó el hombre, a la vez que catalogó de "tragedia" el cierre de empresas locales.

Quiñones llegó hasta la tienda Clubman en San Patricio, y se probó varios pantalones, con la asistencia del gerente de la tienda, Eduardo Rosado, quien le marcó el ruedo y otras alteraciones para el servicio de sastrería.

A pocos pasos, otros visitantes habituales del local miraban las camisas, pantalones y chaquetas de vestir a mitad de precio, con una mezcla de resignación y tristeza.

"Los que tenemos negocios propios sabemos lo difícil que es mantenerlos abiertos... La falta de protección del Gobierno a las empresas locales es muy triste", comentó José Antonio Díaz, también cliente de muchos años de Clubman.

Para Díaz, la desaparición de las tiendas de ropa de capital puertorriqueño, entre las que mencionó Velasco, González Padín y Clubman, obliga a las personas a patrocinar las cadenas multinacionales.

José Enrique Molinari, otro de los clientes frecuentes, dijo que optará por comprar ropa cuando viaje, ya que no es de ir mucho a las tiendas.

En contraste con la nostalgia que expresaron los hombres, las mujeres que recorrían el local de Clubman ayer iban pendientes a los especiales.

"Compraba aquí antes para mi esposo porque traían ropa que hacía que el hombre se distinguiera. Pero la competencia es dura y los precios eran muy altos"...

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