La debacle había sido anunciada

Por Joanisabel González

joanisabel.gonzalez@elnuevodia.com

Habló del Fondo de Estabilización al que se allegaron unos $2,000 millones, a través de una emisión de bonos a emitirse a través de la Corporación para el Financiamiento del Impuesto a la Venta y Uso (Cofina) y de cómo se había disparado la deuda pública.

A preguntas de un legislador en torno a cómo traer más dinero recurrente al fisco, García dejó entrever que no quedaba tela de dónde cortar. El país adeudaba entonces casi lo mismo que el tamaño de la economía: unos $60,656 millones. "Esta escandalosa estadística es el resultado de la falta de disciplina fiscal y los déficits enmascarados", dijo García.

El legislador insistió. Y fue entonces cuando García reveló que al Gobierno le quedaba a lo sumo entre un año y un año y medio para operar, antes de su insolvencia absoluta.

Al escucharlo, paré de escribir. Miré a todos lados, pero nadie -ni siquiera el que hizo la pregunta-, se inmutó.

Han transcurrido unos 29 meses desde ese día y desde la nota que este diario publicó.

También hemos tenido, desde entonces, una decena de ajustes crediticios por parte de las casas acreditadoras, pues las señales de alerta no llegaron con las elecciones de noviembre pasado...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR